Blas Piñar inaugura la nueva sede de Fuerza Nueva en Madrid
Anoche fue inaugurada la nueva sede de Fuerza Nueva en la calle de Mejía Lequerica, número 8, en Madrid. Durante el acto se procedió a la imposición de dieciséis condecoraciones con el lema: «Lealtad es mi virtud» a «los camaradas de la primera hora».Tras este acto, el vicepresidente nacional de Fuerza Nueva, Angel Ortuño, explicó que los condecorados lo habían sido por «sentir una misma vocación política». Diferenció entre los políticos de condiciones y los políticos de ambiciones, cuyo objetivo es seguir medrando en sus puestos.
A continuación tomó la palabra Blas Piñar, quien elogió ...
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Anoche fue inaugurada la nueva sede de Fuerza Nueva en la calle de Mejía Lequerica, número 8, en Madrid. Durante el acto se procedió a la imposición de dieciséis condecoraciones con el lema: «Lealtad es mi virtud» a «los camaradas de la primera hora».Tras este acto, el vicepresidente nacional de Fuerza Nueva, Angel Ortuño, explicó que los condecorados lo habían sido por «sentir una misma vocación política». Diferenció entre los políticos de condiciones y los políticos de ambiciones, cuyo objetivo es seguir medrando en sus puestos.
A continuación tomó la palabra Blas Piñar, quien elogió al militante de Fuerza Nueva recientemente fallecido «en acto de servicio», José Luis Frutos. Hizo una visión histórica del partido y recordó las ideas que le dieron dos personajes en la fundación del partido en 1966: «Hay que permanecer fijo, seguro, inamovible, sin preocuparse del flujo y reflujo de las gentes, sin desmayar, como la roca. Hemos querido hoy -añadió el señor Piñar- destacar a los leales, porque hoy la gran virtud es la lealtad.»
Finalmente, Blas Piñar hizo unas reflexiones sobre la significación de la nueva singladura política que se abría para Fuerza Nueva. «Ha llegado la hora», afirmó, «de recoger la cosecha de la indignidad política sembrada por el actual Gobierno. El pueblo español se está poniendo en pie, estamos contagiando el valor a los españoles, que estaban a punto de perderlo.»