Alianza Popular intenta afirmar su identidad al margen de Coalición Democrática

Félix Pastor Ridruejo, presidente de Alianza Popular (AP), confirmó públicamente, en el transcurso de una cena-mitin organizada por la provincial de Madrid, de una parte, la ruptura de hecho entre AP y los partidos de Coalición Democrática que dirigen Alfonso Osorio y José María de Areilza, y por otra, la vuelta a la presidencia de AP de Manuel Fraga. También criticó la escisión de Federico Silva y Gonzalo Fernández de la Mora.

El señor Pastor Ridruejo, que cerró el turno de intervenciones tras una cena en la que se recaudaron fondos para el partido, con una rifa y una subasta, afirmó t...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Félix Pastor Ridruejo, presidente de Alianza Popular (AP), confirmó públicamente, en el transcurso de una cena-mitin organizada por la provincial de Madrid, de una parte, la ruptura de hecho entre AP y los partidos de Coalición Democrática que dirigen Alfonso Osorio y José María de Areilza, y por otra, la vuelta a la presidencia de AP de Manuel Fraga. También criticó la escisión de Federico Silva y Gonzalo Fernández de la Mora.

El señor Pastor Ridruejo, que cerró el turno de intervenciones tras una cena en la que se recaudaron fondos para el partido, con una rifa y una subasta, afirmó textualmente que AP había corrido el riesgo de difuminar su propia identidad al acudir a las últimas elecciones con grupos que no se identifican exactamente con el partido. «Es posible», dijo, «que nos hayamos equivocado, pero lo hicimos de buena fe», y tras afirmar que AP mantendría su propia identidad, aseguró que «no hay que romper el grupo parlamentario de Coalición Democrática».El propósito de individualizar y potenciar AP quedó claro en varios momentos de la intervención del señor Pastor Ridruejo, así cuando se refirió al grupo parlamentario de CD «que dominan los diputados de AP» y al definir al partido como «una gran fuerza nacional, la única auténticamente organizada de la derecha».

En círculos próximos a los señores Osorio y Areilza el señor Pastor pasa por ser el responsable directo del intento de potenciar AP, en detrimento de la posible unidad entre los tres partidos que integran CD, tal y como se acordó para el futuro al constituirse CD en el llamado pacto de Aravaca.

Fraga, presidente

El actual presidente de AP, que será propuesto con toda probabilidad para la secretaría general del partido en el próximo congreso nacional, si prospera, como parece, la tesis de que el señor Fraga asuma la presidencia y se aleje un tanto del choque diario por los temas del partido, señaló también que «AP es el único partido de derechas, demócrata y progresista, que acató la Constitución, a la que se había dado el voto afirmativo por el bien de España, aunque pudiese afectar a nuestra propia identidad».En otro momento criticó la marcha de ADE y UNE, capitaneadas por Federico Silva y Gonzalo Fernández de la Mora: «Cuando decidieron suspender su vinculación con la Federación de Alianza Popular», dijo, «este partido no hizo nada para acelerar la ruptura, porque estamos a favor de la unidad. La misma unidad que es bandera de otros, pero que la rompen. No creemos», añadió, «en el llamamiento a la unidad de aquellos que han roto la unidad de AP.»

La última parte de su intervención fue un llamamiento para que «lluevan cartas» solicitando la vuelta de Fraga a la presidencia del partido, e hizo grandes elogios del ex secretario general de AP, al que calificó como «un hombre al servicio de España y no España a su servicio».

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Antes habían intervenido otros oradores: Miguel Ramírez afirmó que «Madrid no es de izquierdas» y propuso acciones para que la derecha se manifieste a través del movimiento ciudadano frente al Ayuntamiento izquierdista.

Guillermo Piera se refirió a las escisiones de ADE y UNE y dijo que habían preferido ser cabeza de ratón a cola de león. Afirmó que con la campaña de afiliación que ahora se monta hay que pasar de 194.000 votos a los 500.000.

Isabel Barroso insistió en que AP tiene que ser el gran partido de derechas, imaginativo, progresista y dialogante, que España necesita.

Carlos Argos aseguró que «no somos nostálgicos de nada ni de nadie, pero pedimos que se respete la historia de España porque nuestros hijos también tendrán que respetar la nuestra». En otro momento insistió en la identidad diferenciada de AP, de la que dijo que «tiene su propia ideología, que es la de siempre. Creemos en la democracia», añadió, «porque creemos en la libertad seria y profunda, creemos en una manera de entender al hombre que empalma con la vieja tradición europea y cristiana y que es la clave de una cultura».

Archivado En