Dos guardias civiles, asesinados ayer en Madrid

Dos guardias civiles, Casimiro González Reyes y Jesús; Fernández Rodríguez, fueron asesinados ayer en Madrid cuando, vestidos de paisano, caminaban por la calle de Pedro Alonso, en la colonia de Villa Rosa, del barrio de Canillas. Los únicos testigos del atentado fueron tres niños en edad escolar.Los autores del atentado fueron dos jóvenes, quienes esperaron sentados en el suelo el paso de los guardias civiles. Cuando éstos estaban cerca, los dos jóvenes se cubrieron rápidamente los rostros y dispararon contra los guardias dos ráfagas de metralleta. A unos veinte metros de distancia. les estab...

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Dos guardias civiles, Casimiro González Reyes y Jesús; Fernández Rodríguez, fueron asesinados ayer en Madrid cuando, vestidos de paisano, caminaban por la calle de Pedro Alonso, en la colonia de Villa Rosa, del barrio de Canillas. Los únicos testigos del atentado fueron tres niños en edad escolar.Los autores del atentado fueron dos jóvenes, quienes esperaron sentados en el suelo el paso de los guardias civiles. Cuando éstos estaban cerca, los dos jóvenes se cubrieron rápidamente los rostros y dispararon contra los guardias dos ráfagas de metralleta. A unos veinte metros de distancia. les estaba esperando una tercera persona dentro de un taxi que había sido robado unas horas antes y en el que se dieron a la fuga por la carretera de Canillas. Los dos guardias civiles fueron trasladados rápidamente a la Ciudad Sanitaria La Paz, aunque uno de ellos ya era cadáver cuando se Inició su traslado. El otro murió en el trayecto. Nadie ha reivindicado hasta el momento la autoría del atentado.

La Asociación de Vecinos de Villa Rosa hizo público un comunicado, en el que se suma, junto con todo el barrio, «al dolor de las dos familias y al del cuerpo de la Guardia Civil y Fuerzas de Orden Público, condenando estos actos y exigiendo que sean perseguidas todas estas bandas que últimamente vienen sembrando el terror, el dolor y la inquietud en los ciudadanos».

Por su parte, el alcalde de Madrid, Enrique Tierno Galván, y el Ayuntamiento en pleno han condenado el atentado, al mismo tiempo que hacen un llamamiento a la serenidad de los madrileños. Tierno Galván califica el atentado como «un acto brutal, realizado esta vez en uno de los barrios tradicionalmente más tranquilos y hospitalarios de la ciudad». «Es necesario», dice el alcalde de Madrid, «actuar con la máxima Firmeza y todo el rigor de la ley para que acto de tal brutalidad y, vileza no se vuelva a repetir».

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