Motociclismo

El nacional de velocidad comenzó sin triunfos de Nieto

Con mucho público, un fortísimo viento racheado y una polémica organización se disputó en el circuito tarraconense de Calafat la prueba inaugural del Campeonato de España de Velocidad. Solventados los graves problemas económicos que a punto estuvieron de impedir la celebración de las carreras, éstas pudieron llevarse a cabo, con victorias de Mateos, Tormo, Morante y Palomo en sus respectivas categorías.La carrera de cincuenta centímetros cúbicos no tuvo historia. Tormo, que corre prácticamente contra nadie, se encargó de darle la escasa que tuvo, al caerse absurdamente cuando la pruelia tocaba...

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Con mucho público, un fortísimo viento racheado y una polémica organización se disputó en el circuito tarraconense de Calafat la prueba inaugural del Campeonato de España de Velocidad. Solventados los graves problemas económicos que a punto estuvieron de impedir la celebración de las carreras, éstas pudieron llevarse a cabo, con victorias de Mateos, Tormo, Morante y Palomo en sus respectivas categorías.La carrera de cincuenta centímetros cúbicos no tuvo historia. Tormo, que corre prácticamente contra nadie, se encargó de darle la escasa que tuvo, al caerse absurdamente cuando la pruelia tocaba a su fin y nadie podía alcanzarle. Dio, pues, el triunfo a Mateos.

En 125 c.c. se esperaba un gran duelo entre Tormo,con su Bultac o oficial, y las recién construidi,s Derbi de Nieto y Grau. Pero las Derbi, terminadas prácticamente horas antes de la carrera, no estuvieron a la altura de las circuristancias, y Tormo no encontró dificultades para vencer con holgura, por delante de Grau y Nieto. Sin erribargo, cuando las Derbi estén más rodadas, la lucha promete ser apasionante.

En 250 c.c., el madrileño Merante dio toda una lección de buen hacer, pese a no estar aún integrado en el grupo de los superfavoritos. Morante, con un estilo precioso y efectivo, mantuvo a raya los desesperados ataques de Víctor Palomo, Grau y Reyes -este último, otro joven valor que destaca-, distanciando sin remedio a todes ellos. Nieto, que salió muy mal, trató durante algunas vueltas, de recuperar su desventaja, pera desistió en seguida.

Finalmente, en 750 c.c. hubo un gran duelo entre la Yamaha 750 de Palomo y la 350 de Morante. Pese a la desventaja en la potencia, Merante aguantó bien el ritmo del ex campeón del mundo de esquí acuático, hasta que una rotura en ta cadena -él sabía que estaba defectuosa, que se podía romper, pero no tenía otra- obligó a Morante a retirarse y dejar el segundo puesto) a Grau, aunque muy retrasado.

La organización, que con absurdas pretensiones económicas estuvo a punto de hacer que la prueba no se celebrase -los pilotos, salvo Tormo, se negaban a correr si no se les daban las primas acostumbradas y no los mínimos que exige la federación, como proponía, inesperadamente, la organización-, no impidió, en ningún momento, que los espectadores cruzaran la pista, ni que se colocaran en los lugares que prefiriesen para ver mejor la carrera, aun a riesgo de sus propias vidas y de los pilotos. Una carrera requiere un servicio de orden y de seguridad estricto para impedir que unajornada deportiva se convierta en trágica, y así deben entenderlo los organizadores, por más que ello les cueste dinero y molestias.

Mundial de 750 c.c.

Por otro lado, el venezolano Johnny Cecotto, sobre Yamaha, ganó la segunda prueba puntuable para el mundial de la categoría de 750 c.c., disputada en el circuito inglés de Brands Hatch.

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