Nueve muertos en el hundimiento de un edificio en Logroño

Nueve cadáveres -dos hombres, una mujer, un joven de dieciséis años y cinco niños- fueron rescatados ayer de entre los escombros que produjo el hundimiento de un edificio de tres plantas, situado en el casco antiguo de Logroño. El hecho se produjo a las cinco de la madrugada de ayer. Las víctimas son Basilio Pisa, de 42 años; Elvíra Díez, de 33; Manuel Díez, de diecisiete; Fructuoso Manzano, de 49; Marco Pisa, de siete años; Juan Pisa, de nueve; Milagros Díaz Maya, de siete; Mario Díaz, de cinco, y Yolanda Pisa Díaz, de tres años.El hundimiento, del que nadie se percató hasta las 8.30 de la ma...

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Nueve cadáveres -dos hombres, una mujer, un joven de dieciséis años y cinco niños- fueron rescatados ayer de entre los escombros que produjo el hundimiento de un edificio de tres plantas, situado en el casco antiguo de Logroño. El hecho se produjo a las cinco de la madrugada de ayer. Las víctimas son Basilio Pisa, de 42 años; Elvíra Díez, de 33; Manuel Díez, de diecisiete; Fructuoso Manzano, de 49; Marco Pisa, de siete años; Juan Pisa, de nueve; Milagros Díaz Maya, de siete; Mario Díaz, de cinco, y Yolanda Pisa Díaz, de tres años.El hundimiento, del que nadie se percató hasta las 8.30 de la mañana, no afecto a la fachada del edificio, que, incomprensiblemente, quedó en pie. El edificio siniestrado se encuentra en una zona en la que el Ayuntamiento viene comprando este tipo de edificios viejos con el fin de derribarlos, para seguir un plan de restauración y edificación denominado Plan Rua Vieja..

Avisados los bomberos, Policía Municipal y Cruz Roja, tres horas y media después de producirse el derrumbamiento, procedieron a rescatar posibles supervivientes de entre los escombros, con gran peligro de nuevos derrumbamientos. En el sótano había unas 150 ovejas. Algunos de los inquilinos eran gitanos, ya que en el barrio viven unas mil personas de esta raza, unos doscientos de los cuales se congregaron ante las autoridades y bomberos para protestar por lo sucedido y por sus malas condiciones de vivienda.

Durante los trabajos de desescombro se oyeron lamentos en varias ocasiones, lo que hizo suponer que aún había esperanzas de rescatar con vida a algún vecino. A las 10.15 de la mañana fue sacado vivo un niño de un año, Basilio Pisa Díez, hijo de dos de los fallecidos, al que se trasladó inmediatamente a la unidad de vigilancia intensiva de un centro sanitario.

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