El Estudiantes fue mejor equipo, pero ganó el Madrid

A falta de dos jornadas el Real Madrid cantó en el Ramiro el alirón. Fue un alirón ensombrecido y deslucido por que hay que decir que ayer no mereció su victoria frente al Estudiantes. Jugó menos como equipo -le salvaron las actuaciones de Brabender y Meister- y de no haberse visto beneficiado por los árbitros no hubiese ganado porque su rival fue mejor e hizo más méritos para vencer, en una palabra fue el mejor equipo en la cancha.Los blancos apoyaron, era efectivamente su arma, su ataque en Meister, hombre muy difícil de parar para los colegiales, pero esto no fue suficiente. Tuvo que cuajar...

A falta de dos jornadas el Real Madrid cantó en el Ramiro el alirón. Fue un alirón ensombrecido y deslucido por que hay que decir que ayer no mereció su victoria frente al Estudiantes. Jugó menos como equipo -le salvaron las actuaciones de Brabender y Meister- y de no haberse visto beneficiado por los árbitros no hubiese ganado porque su rival fue mejor e hizo más méritos para vencer, en una palabra fue el mejor equipo en la cancha.Los blancos apoyaron, era efectivamente su arma, su ataque en Meister, hombre muy difícil de parar para los colegiales, pero esto no fue suficiente. Tuvo que cuajar Brabender otra genial actuación para que el Madrid, sin hacer ni mucho menos un buen baloncesto, se alzara con la victoria. Entre los dos americanos -uno nacionalizado- sumaron 59 de los 93 puntos puntos de su equipo, lo que hizo que la hinchada del Ramiro gritase repetidas veces: ¡Ha ganado USA!

Jesús Codina hizo un magnífico planteamiento a base de una defensa individual con mentalidad de zonas e igualmente dispuso un inteligente sistema de ataque que complicó la existencia a su rival. Por si fuera poco acertó en los cambios y en la dirección del encuentro. A los cuatro minutos perdía su equipo por 3-11 y tras un tiempo muerto del técnico estudiantil se pasó a un 16-17 tres minutos más tarde.

Gonzalo Sagi Vela cuajó una soberbia actuación y se vació en la cancha. Tuvo mucho que ver con el éxito -lo de ayer en el Maganiños hay que definirlo y considerarlo como un éxito del perdedor- de su equipo, aunque hay que decir que todos lucharon mucho y bien en torno a su entrenador y de no ser por las circunstancias hubieran vencido. Las circunstancias no son un «invento» ya que pese ajugar en su campo, a los nueve minutos del segundo tiempo, al Estudiantes le habían pitado once faltas y al Madrid dos.

Otros resultados

Juventud, 112; Manresa, 94. Tempus, 122; Mollet, 75, y Askatuak, 77; Cotonificio, 91.