Otro árbitro agredido por un jugador de fútbol

Santiago Linacero del Castillo, árbitro de veintiséis años pertenecíente al Colegio Castellano, fue agredido el pasado domingo en el transcurso de un partido de fútbol disputado en el campo de Marichu, en Usera, entre los equipos Unión Meseta de Orcasitas y el Robert Bosch. El agresor fue el jugador Manuel Rodríguez García, de veinticuatro años, que produjo al árbitro fractura de los huesos de la nariz.La agresión se produjo cuando el árbitro expulsó al citado jugador por doble amonestación, sin que éste asimilara bien la decisión. Manuel Rodríguez reaccionó propinando un puñetazo al colegiado...

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Santiago Linacero del Castillo, árbitro de veintiséis años pertenecíente al Colegio Castellano, fue agredido el pasado domingo en el transcurso de un partido de fútbol disputado en el campo de Marichu, en Usera, entre los equipos Unión Meseta de Orcasitas y el Robert Bosch. El agresor fue el jugador Manuel Rodríguez García, de veinticuatro años, que produjo al árbitro fractura de los huesos de la nariz.La agresión se produjo cuando el árbitro expulsó al citado jugador por doble amonestación, sin que éste asimilara bien la decisión. Manuel Rodríguez reaccionó propinando un puñetazo al colegiado, que corrió a refugiarse en vestuaríos perseguido por el jugador y por varios espectadores. Estos y el proplo jugador derri baron la puerta de acceso a la caseta arbitral y, una vez dentro, Manuel Rodríguez volvió a golpear al colegiado.

Dado el cariz que tomaban los acontecimientos, y como el jugador persistía en su empeño de seguir golpeando al árbitro, algunos espectadores consiguieron sujetar al futbolista, mientras el delegado del equipo Robert Bosch daba aviso telefónico al 091. Un jeep de la Policía Nacional se presentó en el campo varios minutos después rescatando al árbitro, que fue trasladado en el vehículo policial a una clínica madrileña, donde se le diagnosticó una «fractura de huesos propios de la nariz, sin desplazamientos, de pronóstico leve, salvo complicaciones ». En la dependencia policial de Usera se tramitan las diligencias.

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