Comienza un nuevo torneo de las Cinco Naciones.

Esta tarde, con los partidos Escocia-Gales, en el campo de Murrayfield, de Edimburgo (ofrecido por televisión), y el Irlanda- Francia, en el Lansdowne Road, de Dublín, comienza una nueva edición del torneo de las Cinco Naciones, verdadera joya del rugby internacional. Descansará Inglaterra. Al margen de unos tiempos de ausencia francesa debido al espíritu más competitivo y profesionalizado del rugby galo, este torneo, sin clasificaciones, sin leyes precisas o reglamentos escritos, que sobrevive con el mejor espíritu de este deporte (intentando sólo ganarse cada partido), ronda ya los cien año...

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Esta tarde, con los partidos Escocia-Gales, en el campo de Murrayfield, de Edimburgo (ofrecido por televisión), y el Irlanda- Francia, en el Lansdowne Road, de Dublín, comienza una nueva edición del torneo de las Cinco Naciones, verdadera joya del rugby internacional. Descansará Inglaterra. Al margen de unos tiempos de ausencia francesa debido al espíritu más competitivo y profesionalizado del rugby galo, este torneo, sin clasificaciones, sin leyes precisas o reglamentos escritos, que sobrevive con el mejor espíritu de este deporte (intentando sólo ganarse cada partido), ronda ya los cien años de convivencia franco-británica. Galés defiende, pues, sólo teóricamente su título de 1978.

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