Torera faena de Luis Miguel Ruiz

Una vez más se lidió en Las Ventas ganado de Sotillo Gutiérrez, ¿les suena de algo esta ganadería? La única explicación válida que encontramos está en que posiblemente sus productos sean los más mansos y descastados de toda la ganadería de bravo. Embestidas cansinas, trotes por la plaza sin hacer caso de capotes, continuo buscar la dehesa y desparramar la vista. Así, con este género, es imposible el lucimiento o la mínima emoción.Luis Miguel Ruiz ha tenido una actuación meritoria, reposado, variado y torero. Su faena al quinto ha sido importante; sin embargo, con el capote no anda a la misma a...

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Una vez más se lidió en Las Ventas ganado de Sotillo Gutiérrez, ¿les suena de algo esta ganadería? La única explicación válida que encontramos está en que posiblemente sus productos sean los más mansos y descastados de toda la ganadería de bravo. Embestidas cansinas, trotes por la plaza sin hacer caso de capotes, continuo buscar la dehesa y desparramar la vista. Así, con este género, es imposible el lucimiento o la mínima emoción.Luis Miguel Ruiz ha tenido una actuación meritoria, reposado, variado y torero. Su faena al quinto ha sido importante; sin embargo, con el capote no anda a la misma altura que con la franela. Larga mucha tela con el capote y aprovecha en exceso los viajes; voluntarioso, quiso poner en suerte a sus dos novillos, pero se excedió en capotazos y al final no los dejaba colocados. Tres chicuelinas y dos revoleras, en cambio, tuvieron calidad. Al segundo de la tarde, un marmolillo que apenas se movía y que embestía sin fijeza, le sacó unos naturales aislados de calidad; hubo temple y mando. Comenzó la faena al quinto con unos muletazos sobre la derecha suaves y mandones, en los que ganó terreno hasta salir a los medios. Luego toreó asentado, variado sobre ambas manos: un trincherazo fue un cartel, una serie con la derecha, erguido a pies juntos y un pase del desprecio destacaron del conjunto. Tardó en cuadrar al novillo, con lo que enfrió los ánimos del público.

Plaza de Las Ventas

Novillos de Sotillo Gutiérrez: Aceptables de presencia, mansos y sin casta; sin dificultades en la muleta, el quinto noble. El Víctor: Estocada baja en la que pierde la muleta (palmas). Estocada tendida en la que pierde la rnuleta (silencio). Luis Miguel Ruiz: Estocada caída y delantera (palmas y saludos). Estocada tendida (oreja). Curro Luque: Pinchazo sin pasar, estocada trasera y descabello (palmas, pitos y saludos). Dos pinchazos y estocada delantera (palmas).

Vulgar y sin clase El Víctor con el capote. Con la muleta, al primero, comenzó bien, ganando terreno hasta los medios, para realizar una faena vulgar y sin mando por codillerar. El novillo le achuchó varias veces por no ir toreado. Al cuarto, otro buey, lo porfió pesada y tenazmente.

Mal Curro Luque con el capote; recibió al tercero a porta-gayola para salir atropellado y perseguido. El banderillero Luis Redondo tuvo el detalle de torear a una mano, pero no logró lucimiento. Luque estuvo valentón; encimista, ahogó la embestida del novillo y abusó de efectismos. El sexto lo volteó aparatosamente y lo lanzó a gran altura por los aires; faena entre dudas, sin acoplarse. El novillo, como todos los lidiados, no tenía peligro, pero ante la mala lidia acabó incierto y se colaba una y otra vez, sin que Luque supiera por dónde meterle mano. Fue una actuación decepcionante de este torero, que había apuntado un toreo de clase en anteriores salidas a Las Ventas.

El triunfo legítimo de Luis Miguel Ruiz merece valorarse ampliamente, si se tiene en cuenta la calidad del ganado y que era la segunda corrida de la temporada.

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