El Barcelona elige hoy nuevo presidente

En medio de un ambiente políticamente cargado y de un enorme interés se celebrarán hoy las elecciones a la presidencia del Barcelona, más que un club. Tres candidatos se presentan: Ferrán Ariño, Josep Lluis Núñez y Nicolau Casaus, tres hombres con biografías y significaciones muy distintas. El censo está compuesto por 56.340 votantes, todos aquellos socios que tienen veintiún años cumplidos y un mínimo de cuatro de antigüedad en el club. La masa social del Barcelona rebasa el número de 77.000. Se han dispuesto 54 urnas en una explanada contigua al Camp Nou, y de nueve de la mañana a diez de la...

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En medio de un ambiente políticamente cargado y de un enorme interés se celebrarán hoy las elecciones a la presidencia del Barcelona, más que un club. Tres candidatos se presentan: Ferrán Ariño, Josep Lluis Núñez y Nicolau Casaus, tres hombres con biografías y significaciones muy distintas. El censo está compuesto por 56.340 votantes, todos aquellos socios que tienen veintiún años cumplidos y un mínimo de cuatro de antigüedad en el club. La masa social del Barcelona rebasa el número de 77.000. Se han dispuesto 54 urnas en una explanada contigua al Camp Nou, y de nueve de la mañana a diez de la noche estarán abiertas para la votación; el recuento se irá haciendo durante todo el día y se espera que a las doce de la noche pueda conocerse el nombre del triunfador. En principio no hay favorito claro

Cuando Montal pronunció su celebrada frase el Barca es mes que un club, no hizo sino confirmar algo de todos sabido. Desde su creación, el Barcelona estuvo identificado con el más puro catalanismo. En los últimos cuarenta años las circunstancias le convirtieron, además, en la única vía de expresión de ese sentimiento nacionalista y reforzaron esa significación. Hoy, el barcelonismo y el catalanismo son una misma cosa, y eso explica el enorme interés que han despertado las elecciones a la presidencia del club. Ocurre, además, que hasta ahora las elecciones a la presidencia de los clubs de fútbol carecían de interés, porque sólo eran votantes los compriomisarios -escogidos por azar más o menos puro entre la masa social- y cuyo número nunca fue significativo. Ahora votan todos los socios sin más restricciones que la edad y la antigüedad en el club, y ese censo de 56.340 votantes ofrece un buen campo de pruebas para algunos cara incluso a las próximas municipales.La gran importancia que tiene el club en la vida pública catalana hace que el cargo de presidente de la entidad sea deseable para muchos, a pesar de que la actual situación del Barca es mala. El club arrastra un déficit de más de quinientos millones -casi equivalente a su presupuesto anual-; debe trescientos a las cajas de ahorros y más de doscientos a la banca privada. El pago de esta porción es ya inaplazable. Estas deudas, además, obligan al club a pagar anualmente ochenta millones largos de intereses, cantidad equivalente al precio del traspaso de una gran figura mundial. La anunciada marcha de Cruyff, además, abre un tremendo hueco en la plantilla y fuerza a la contratación inmediata de otra gran estrella, con el consiguiente desembolso. Pues bien, pese a esta catastrófica situación económica la lucha electoral del Barça ha estado cargada de nombres, aunque al final todo,se haya reducido a tres opciones electorales.

Después de algunas alianzas y retiradas, quedaron sólo seis hombres: Pérez Mateu, Víctor Sagi, Joan Casals, Nicolau Casaus, Josep Lluis Núñez y Ferrán Ariño. El primero de ellos no consiguió reunir las 1.800 firmas necesarias para presentar la candidatura. Víctor Sagi y Joan Casals abandonaron recientemente, en pleno período electoral. Sorprendió de forma especial la renuncia de Sagi, hijo de Sagi Barba, célebre jugador del club antes de la guerra. Sagi, propietario de una gran empresa publicitaria, representaba el continuismo, tenía el respaldo de la junta anterior y era, para muchos, el favorito. Las razones de su retirada no han quedado claras. Se piensa que tenía un enorme temor a la derrota, que hubiera repercutido en sus negocios. Por lo que respecta a Joan Casals, no se le concedían grandes posibilidades, y él ha decidido integrarse en la candidatura de Núñez. Tanto Sagi como Casals han explicado que con su actitud sólo pretenden reducir las opciones electorales, para no dividir al socio. Los tres candidatos que finalmente se presentan son éstos:

Ferrán Ariño: Director de unos laboratorios farmacéuticos y hombre ligado a la Banca Catalana, de Jordi Pujol. También es militante de Convergencia Democrática de Catalunya. Tiene 48 años. Fue directivo con Montal -llegó a ser presidente del Barcelona Atlético y de la comisión deportiva- y se valoró mucho el trabajo realizado por él en la cantera del club, que estructuró bien y cuyos resultados han sido palpables. Hace dos años saltó del club por enfrentamiento, con el «clan holandés» y desde entonces ha preparado su retorno. Para la campaña electoral ha contado con el apoyo del PSUC -se habla en Barcelona de que PSUC y Convergencia Democrática de Catalunya planean presentarse juntos a las municipales-. Esto ha hecho de su candidatura la más polémica y la de mayores implicaciones políticas. El PSUC le ha organizado mítines en los barrios y en las asociaciones de vecinos, y ha puesto a su disposición el Grupo Mundo, importante cadena de periódicos que comprende Tele-Exprés, Mundo Diario, Catalunya Exprés y 4-2-4, este último especializado en deportes. Ferrán Ariño aúna en sí experiencia en cargos directivos, eficiencia en el planteamiento de la cantera del club y catalanismo. Socio número 27.037.

Josep Lluis Núñez: vasco de nacimiento, aunque reside en Barcelona desde niño. Cuenta 46 años. Es propiario de la constructora Núñez y Navarro, imperio económico que controla 120 empresas menores. Tiene la fuerza d el dinero y ha sido agresivo en sus planteamientos. « Es preciso renovar el club. No sirve ningún hombre anterior. Ganaré porque soy un triunfador nato.» Su mayor problema es que no nació en Cataluña, y la reciente «catalanización» de su nombre de pila no ha sido suficiente, ni tampoco el hecho de que viva en Barcelona desde niño. Pero en la grave crisis económica por que atraviesa el club podría despertar la confianza de muchos por su enorme poder económico. Es partidario de convencer a Cruyff de que siga en el club. Se declara apolítico y ataca las candidaturas políticas, aunque se confiesa catalanista y de derechas. Socio número 21.597

Nicolau Casaus:industrial textil, conecta, en esto y en todo, con la más pura tradición del barcelonismo de solera. Es mucho mayor que los otros dos, pues ya ha cumplido los 65 años. Hombre de la Esquerra Republicana, fue detenido después de la guerra y condenado a muerte. El obispo de Barcelona, Modrego Casaus, tío suyo, logró salvarle la vida. Tras años de cárcel quedó en libertad, pero sus antecedentes le han impedido, hasta ahora, presentarse al cargo de presidente del club. No obstante, siempre fue un hombre conocido entre el barcelonismo. Ha sido presiden te durante los últimos dieciocho años de la Penya Barcelonista y ha impulsado la creación de muchas otras. Respaldó las candidaturas de Baret y Casacuberta, los dos derrotados por Montal. Partidario de austeridad en la gestión del club. Representa la tradición, la solera. Socio número 7.202.

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