Dominio implacable de los BMW en el Jarama

Con muy poco público -debido a la fuerte lluvia que cayó sobre Madrid en las horas precedentes- y con un actuación lamentable de los comisarios deportivos, se celebraron las Cuatro Horas del Jarama, prueba puntuable para el Campeonato de Europa de Turismos. El dominio de los potentísimos BMW fue tan abrumador, que, cuando sólo se llevaban diez minutos de carrera, éstos comenzaban a doblar a los rezagados.

La prueba dio comienzo con cierto forcejeo entre los tres BMW-Luigi y el vehículo de idénticas características inscrito por Alpina. Pero pronto este último quedaba algo descolgado, sin...

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Con muy poco público -debido a la fuerte lluvia que cayó sobre Madrid en las horas precedentes- y con un actuación lamentable de los comisarios deportivos, se celebraron las Cuatro Horas del Jarama, prueba puntuable para el Campeonato de Europa de Turismos. El dominio de los potentísimos BMW fue tan abrumador, que, cuando sólo se llevaban diez minutos de carrera, éstos comenzaban a doblar a los rezagados.

La prueba dio comienzo con cierto forcejeo entre los tres BMW-Luigi y el vehículo de idénticas características inscrito por Alpina. Pero pronto este último quedaba algo descolgado, sin posibilidad de inquietar a sus rivales, aunque siempre Tuy por delante del resto. La unica incógnita se centraba en saber cuál de los tres vehículos sería el vencedor. Cuando faltaban pocos minutos para que la carrera finalizase, y marchaba en cabeza Grano, desde el box se le ordenaba que dejase pasar por delante a sus compañeros Xhenceval-Dieudonne, directamente implicados en el título de pilotos (el de marcas ya está en poder de BMW). Sin embargo, el italiano-Grano no cedía, logrando la victoria ante la sorpresa e indignación de sus directivos y compañeros de equipo. «No se habla concretado nada previamente, por lo que yo no tengo por qué obedecer esta orden», comentaría al final Grano, quien, de paso, hacia gestiones para correr la siguiente prueba (Estoril, el próximo domingo) con otro equipo, sabedor de su inestabilidad futura en el BMW-Luigi.Por parte española, la exhibición corrió a cargo de Sanz de Madrid y de Sanjurjo. El primero de ellos, magnífico, se mantuvo durante la primera hora de carrera en quinta posición, inmediatamente detrás de los cuatro inalcanzables BMW 3.5, siendo la gran sorpresa de la carrera. El otro gran destacado sería el gallego Sanjurjo, quien, mientrasllovía, dio una auténtica lección de conducción sobre agua.

Sin embargo, ambos tendrían que abandonar por problemas mecánicos dejando el primer puesto entre los pilotos naciónales a la pareja Zapico-Ortiz, quienes, sobre uno de los Clirysler 2L oficiales, terminaban en octava posición.

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