Escalas, nueva estrella de la decaída natación española

Tiene dieciséis años, acaba de terminar el BUP y es alto y desgarbado. Rafael Escalas, la más firme promesa de la decaída natación española, ratificó en el Torneo Ocho Naciones celebrado en Reikjavik, su condición de rey del fondo en el nado libre, al conseguir batir una vez más -en la actual temporada lo ha rebajado en tres ocasiones- el récord de España de los 1.500 metros.El joven discípulo de Juan Fortuny, compañero de entrenos y de club de Antonia Real -ambos pertenecen al CN Palma-, ha tomado el relevo a José Bas, quien durante los dos últimos años ha sido el recordman imbatible en l...

Tiene dieciséis años, acaba de terminar el BUP y es alto y desgarbado. Rafael Escalas, la más firme promesa de la decaída natación española, ratificó en el Torneo Ocho Naciones celebrado en Reikjavik, su condición de rey del fondo en el nado libre, al conseguir batir una vez más -en la actual temporada lo ha rebajado en tres ocasiones- el récord de España de los 1.500 metros.El joven discípulo de Juan Fortuny, compañero de entrenos y de club de Antonia Real -ambos pertenecen al CN Palma-, ha tomado el relevo a José Bas, quien durante los dos últimos años ha sido el recordman imbatible en los ochocientos y 1.500 metros, al comienzo de esta temporada a raíz de los Campeonatos de España de Invierno celebrados en la piscina del Club Náutico de Vigo. En aquella ocasión, el 20 de marzo, Escalas lograba cruzar una de las barreras más significativas en la historia de la natación española, la de los dieciséis minutos en la prueba de los 1.500 metros, estableciendo con un récord de 15-58-8 el récord absoluto de la distancia en piscina de veinticinco metros. Siete días más tarde, en Barcelona, el joven nadador mallorquín ratificaba su récord, ya en piscina de cincuenta metros.A los ánimos familiares se unirían, poco después, los de un gran campeón de la natación española, Enrique Grandos Aumacellas, primer olímpico que tuvo España en este deporte, recordman nacional en el nado libre desde los cien a los 1.500 metros, quien a los pocos años de llegar a Palma de Mallorca se hizo cargo de la presidencia de la Federación Balear Ayudado por un grupo de entusiastas amigos, entre los que se encuentra su hermano Jorge, otro gran campeón de la natación hispana en los años 50, se proponen conseguir los más altos logros para la natación balear, en los próximos años.El joven Escalas ha tenido muchas de estas cosas a su favor mentalidad familiar, entrenador capaz en Juan Fortuny, instalaciones en el CN Palma y un gran equipo federativo comandado por Enrique Granados. A esto habría que añadir esa especial mentalidad de campeón, con afán de superación y sacrificio -el entrenamiento diario del actual campeón de España es de 12.000 metros repartidos en dos sesiones- durante- los doce meses del año.Recién llegado de Reikjavik, Rafael Escalas nos confirmaba que su próxima meta está en bajar su récord actual de 16-10-6 en piscina grande por debajo de la barrera de los dieciséis minutos. En las próximas semanas se le presentan dos ocasiones, los Campeonatos de España absolutosque se celebrarán en Las Palmas del 1 al 5 de agosto la gran cita de los Campeonatos de Europa en la Iocalidad sueca de Jonköping. «Allí tendré como rivales a grandes nadadores de la categoría del ruso Salnikov, actual recordman europeo con un tiempo de 15-27-4, al también soviético Parinov (15-33-49), al sueco Anderson, al noruego Borgstrom, al alemán Sdrobach y al húngaro VIadar, todos ellos grandes nadadores que pueden llevarme hasta esa meta inmediata que me he propuesto de bajar la barrera de los dieciséis minutos.»