La Segunda División otro problema para la asamblea del día 8

La Segunda División «B» va a traer cola. Serán cuarenta equipos los que la integren en dos grupos, y sobre la formación de éstos no hay unanimidad entre los clubs. Los cuarenta implicados han sido preguntados por EL PAIS sobre sus preferencias. Unos prefieren partir la Península por la mitad horizontalmente y formar un grupo norte y otro sur; otros son partidarios de la diagonal Noreste- Sureste, sin unanimidad desde dónde debe partir la diagonal y, por último, tres equipos, Castilla, Atlético Madrileño y Onteniente, no se pronunciaron al respecto.El 8 de julio, en la asamblea del fútbol nacio...

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La Segunda División «B» va a traer cola. Serán cuarenta equipos los que la integren en dos grupos, y sobre la formación de éstos no hay unanimidad entre los clubs. Los cuarenta implicados han sido preguntados por EL PAIS sobre sus preferencias. Unos prefieren partir la Península por la mitad horizontalmente y formar un grupo norte y otro sur; otros son partidarios de la diagonal Noreste- Sureste, sin unanimidad desde dónde debe partir la diagonal y, por último, tres equipos, Castilla, Atlético Madrileño y Onteniente, no se pronunciaron al respecto.El 8 de julio, en la asamblea del fútbol nacional, la Federación someterá a aprobación una propuesta que aún no ha sido dada a conocer de manera oficial. Los cuarenta equipos de la Segunda División « B» darán su voto negativo o positivo, según sus preferencias, siempre basadas, más que en una mayor competitividad, en una proximidad geográfica. A varios equipos, esta Segunda División «B» les parece una verdadera locura, ya que les obligará a realizar desplazamientos de mil kilómetros, demasiados para una categoría que a fin de cuentas es la tercera del fútbol nacional.

Realmente va a ser difícil contentar a unos y a otros. Una vez efectuado el sondeo entre todos los equipos, el emplazamiento geográfico de Huesca y Badajoz es el que, al parecer, va a crear mayor conflictividad en la asamblea, en lo que se refiere a la propuesta de jugar diagonalmente. Las razones que aducen algunos para jugar divididos horizontalmente se basan en que es preferible jugar en unos campos que van a presentar unas condiciones más o menos parejas entre ellos en razón de la diferente climatología peninsular. Los que quieren jugar en diagonal aducen que España está, por lo general, mejor comunicada por vía terrestre en dirección vertical que horizontal.

Realmente, hay una mayoría de equipos que prefieren jugar en diagonal, veinticinco, pero discrepan notablemente en el punto de salida de la misma. Unos la prefieren que salga de Gerona, otros de Bilbao, amén de las preferencias particulares de cada uno, que prefieren que esta diagonal sea quebrada. Los partidarios de la diagonal, en general, son Caudal, Ferrol, Pontevedra, San Andrés, Sestao, Lérida, Barcelona Atlético, Basconia, Real Unión, Leonesa, Palencia, Mallorca, Atlético Baleares, Gerona, Langreo, Compostela, Orense, Olímpico, Eldense, Mirandés, Bilbao Athletic, Sevilla Atlético, Huesca, Vinaroz y Almería.

Los equipos partidarios de jugar la Segunda División «B» en un grupo norte y otro sur son Ensidesa, Tudelano, Badajoz, Levante, Jerez Deportivo, Díter Zafra, Ceuta, Torrejón, Algeciras, Portuense, Linares y Pegaso. Onteniente y Atlético Madrileño se conformarán sin una decisión propia, y Castilla aún no había estudiado las conveniencias de jugar horizontal o diagonalmente.

La diversidad de opiniones va a ser un verdadero problema para la asamblea. El hecho de que el Huesca y el Badajoz representen los equipos más incómodos para llegar a un acuerdo por su situación geográfica, podría arreglarse con una subvención para paliar los gasto, originados por unos desplazamientos excesivamente largos.

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