G. P. de Bélgica: Villota no figura en la lista oficial

Emilio Villota participará, al parecer, en los entrenamientos oficiales para el Gran Premio de Bélgica. El español no ha recibido ninguna comunicación oficial sobre su exclusión de los mismos, pese a que la organización belga hizo pública la lista de los ocho corredores que no podrán participar y entre los cuales estaba él.La Motor Race Consultant, organismo que vela por los intereses de los pilotos, intenta que la decisión de los organizadores belgas no se lleve a cabo, y que puedan participar en los entrenamientos los 34 pilotos inscritos. Sin embargo, y pese al no apercibimiento oficial de ...

Emilio Villota participará, al parecer, en los entrenamientos oficiales para el Gran Premio de Bélgica. El español no ha recibido ninguna comunicación oficial sobre su exclusión de los mismos, pese a que la organización belga hizo pública la lista de los ocho corredores que no podrán participar y entre los cuales estaba él.La Motor Race Consultant, organismo que vela por los intereses de los pilotos, intenta que la decisión de los organizadores belgas no se lleve a cabo, y que puedan participar en los entrenamientos los 34 pilotos inscritos. Sin embargo, y pese al no apercibimiento oficial de Villota y de otros encartados, como el americano Lunger, todo hace pensar que los belgas no se han vuelto atrás. Ayer, la agencia Alfil comunicó la lista oficial con veintinueve participantes entre los que no se encuentra el español. No parece, pues, que las discusiones hayan terminado en el circuito de Zolder, y de ello depende la actuación o no de Villota.

En otro orden de cosas, la muerte del copiloto Manuel Barbeito en el Criterium Luis de Baviera, ha levantado una lógica polémica por las circunstancias del trazado de la prueba. El hecho de la supresión de los caminos forestales por carreteras de asfalto ya supone un incremento del promedio de velocidad, y si a esto se añade el que los pilotos tengan que dar varias vueltas a un circuito, el rally pierde su carácter de habilidad combinada con velocidad para convertirse exclusivamente en una prueba de velocidad. Los pilotos, tras la primera vuelta toman confianza y apuran al máximo en cada curva o rasante, con lo que aumenta el riesgo y lógicamente, los accidentes.

Si esta desgracia a la que hay que añadir los once heridos -algunos de ellos por estúpidas imprudencias- sirve de algo, debe ser para concienciar a organizadores y público. Unos para prohibir terminantemente este tipo de recorridos y otros para no provocar accidentes por ignorancia.