25 países en los mundiales juniors de Madrid

Casi cien judokas juniors, representantes de veinticinco países de los cinco continentes, se reunirán en Madrid -también debutante- por primera vez para disputar el Campeonato Mundial el próximo fin de semana. Es la última vez que unos campeonatos mundiales se disputarán a cinco categorías. En los próximos mundiales seniors, a disputar en Barcelona en septiembre del próximo año, serán siete las categorías. A las actuales, categorías de pesados, semipesados, medios, semimedios y ligeros, se añadirán entonces las de minimoscas y superpesados. Con el fin de sacar provecho de esta primera experien...

Casi cien judokas juniors, representantes de veinticinco países de los cinco continentes, se reunirán en Madrid -también debutante- por primera vez para disputar el Campeonato Mundial el próximo fin de semana. Es la última vez que unos campeonatos mundiales se disputarán a cinco categorías. En los próximos mundiales seniors, a disputar en Barcelona en septiembre del próximo año, serán siete las categorías. A las actuales, categorías de pesados, semipesados, medios, semimedios y ligeros, se añadirán entonces las de minimoscas y superpesados. Con el fin de sacar provecho de esta primera experiencia organizadora y preparar los mundiales de Barcelona, se reúnen estos días en la capital catalana la comisión de arbitraje y el comité directivo de la Federación Española de Judo.España estará representada en Madrid, en las cinco categorías, al igual que la Unión Soviética, Polonia, Francia, Yugoslavia, Japón, Brasil, Canadá y Estados Unidos. El resto de participantes no acude con el equipo completo. Son: Italia, Gran Bretaña, Alemania Federal, Nigeria, Egipto, Austria., Nueva Zelanda, Mónaco, Corea, Portugal, Bélgica, Holanda, República China, Puerto Rico, Ecuador y Australia. Lógicamente Japón y la Unión Soviética son los máximos favoritos; tras ellos, las posibilidades se las reparten Gran Bretaña, Italia, Francia y Alemania Federal. España está entre las naciones que pueden dar alguna sorpresa, pero siempre dentro de unos claros límites.