La Liga, un mano a mano madrileño

El Atlético de Madrid ya es líder; Luis comienza a estar en condiciones de hacerle un corte de mangas a su Martínez de la Rosa particular. El Atlético se ha encumbrado; a partir de ahora es posible que en el palco del Calderón, además de la corbata, sea obligatorio el uso del frac. El protocolo se ha complicado más, porque de continuar en esa posición el equipo, la presencia en el palco deberá considerarse con la misma seriedad que las funciones de gala. Al pueblo atlético estas cosas seguirán importándole bien poco, porque lo que vale y lo que cuenta es estar por encima del Madrid, equipo que...

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El Atlético de Madrid ya es líder; Luis comienza a estar en condiciones de hacerle un corte de mangas a su Martínez de la Rosa particular. El Atlético se ha encumbrado; a partir de ahora es posible que en el palco del Calderón, además de la corbata, sea obligatorio el uso del frac. El protocolo se ha complicado más, porque de continuar en esa posición el equipo, la presencia en el palco deberá considerarse con la misma seriedad que las funciones de gala. Al pueblo atlético estas cosas seguirán importándole bien poco, porque lo que vale y lo que cuenta es estar por encima del Madrid, equipo que el sábado se merendó al «lobo», para que las cosas sigan donde deben estar. No es bueno que el subversivo «lobo» le gane a Caperucita, que siempre ha sido de derechas.La semana futbolística ha sido, en general, un trauma para la periferia. Salvo el Athletic de Bilbao, que el sábado le dio al Sevilla más que a una estera, los demás han quedado maltrechos. De la doble confrontación madrileño-valenciana han resultado dos triunfos mesetarios. El Valencia cayó en el Bernabéu. El Madrid contó con la ayuda providencial de Jesús Martínez, que remató en su propia portería como si Balaguer fuese el responsable de que sus naranjas de Burriana tengan problemas a costa de aquellos acuerdos firmados por López Bravo, en que, a través de la RENFE, ponen en condiciones óptimas en el Mercado Común los cítricos marroquíes. El Elche valenciano de la Taulal. a pesar de que su presidente, señor Martínez Valero, sea murciano y no haya seguido el camino de la reunificación regional, perdió con el Atlético, que esta vez contó con la presencia de su presidente, que se desplazó, desde Gandía. Los presidentes madrileños tienen, como se ve, una importante querencia al Mediterráneo. Lo malo es que, pese a la cercanía de Gandía y Santa Pola, entre Bernabéu y Calderón sigue habiendo grandes distancias.

Calderón estuvo en Elche, pero desconozco si en el palco del nuevo campo ilicitano estuvo en plan sport o se presentó también con corbata. Lo del atildamiento en su campo se ha puesto serio. Tanto, que a principios de temporada, Adelardo, que fue invitado a presenciar un partido desde el palco, se vio obligado a abandonarlo porque recibió recados de que no podía estar allí sin corbata. El propio vicepresidente tercero -tercero, pero primero en mando-, señor Santos, le dio el último toque de atención. Adelardo, que ha sido para el Atlético al menos tanto como su suegro, se tuvo que marchar al graderío. Esta actitud protocolaria imposibilita el que el hasta hace poco vicepresidente del club, señor De la Mata, invite al palco a Marcelino Camacho, que al margen de Comisiones, es un atlético en potencia. Claro que pienso yo que quizá el señor Santos no se atrevería a ponerse rígido, porque el señor De la Mata era un directivo capaz de ponerle las cosas en su sitio.

Derrotado el Valencia, vencido y humillado el Español por el Betis, en el día de homenaje y despedida a Szusza, y reducido el Barcelona por el Hércules a sus cuarteles de invierno, la cosa ha quedado en un mano a mano entre el Manzanares y Chamartín de la Rosa. Lo grave del Barcelona es que no pudo ganar en una tarde en la que Cruyff dio el «callo». Si con Cruyff en funciones de Von Karajan, la orquesta azulgrana nopasa de ser una agrupación disonante, habrá que ir pensando en volver al uso de las teno.ras. Vale más sardana acompasada que.sinfonía con pitos y flautas.

La última jornada ha supuesto una inyección de moralina para Madrid, Atlético y Athletic, que han de jugar torneos europeos. Para Barcelona y Español, que tienen trances del mismo calibre esta semana, hay ocasión de reconciliación con la parroquia. Esperemos que así suceda.

En segunda ha, habido un resultado sorprendente; el empate del Rayo en Gijón. Los vallecanos han dado la nota aguda de la semana, lo que da a entender que la cosa va en serio. Tan en serio como se la ha tomado el Getafe, que ha vuelto a puntuar fuera de casa. Ya que en Primera no hay modo de democratizar la clasificación, como profetizó el marqués de la Florida, en Segunda parece que le van a hacer caso.

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