Los vascos, esperanzados ante el Ujpestz Dosza-Athletic

Dos marchas ocupan ahora en Bilbao el leiv motiv de las conversaciones futbolísticas: la marcha del Athletic a Budapest, para enfrentarse al Ujpestz Dosza, y la posible marcha de Madariaga, el libero rojiblanco, sustituto de Goicoechea, a cualquier otro equipo, pues parece que sus servicios no le son muy útiles al nuevo entrenador vasco, Koldo Aguirre.

Si Bilbao y Vizcaya no se hubieran visto envueltos en los acontecimientos políticos que comenzaron el pasado lunes y que aún no han concluido totalmente, la victoria del Athletíc en el Bernabéu sonaría en este momento en las bocas de mile...

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Dos marchas ocupan ahora en Bilbao el leiv motiv de las conversaciones futbolísticas: la marcha del Athletic a Budapest, para enfrentarse al Ujpestz Dosza, y la posible marcha de Madariaga, el libero rojiblanco, sustituto de Goicoechea, a cualquier otro equipo, pues parece que sus servicios no le son muy útiles al nuevo entrenador vasco, Koldo Aguirre.

Si Bilbao y Vizcaya no se hubieran visto envueltos en los acontecimientos políticos que comenzaron el pasado lunes y que aún no han concluido totalmente, la victoria del Athletíc en el Bernabéu sonaría en este momento en las bocas de miles y miles de vizcaínos. Así y todo, entre esto y aquello, siempre hay un rato libre para hablar de la hazaña lograda frente a los merengues, a quienes se les veía con vitola de «cocos».Pero lo del Bernabéu es ya historia pasada que, eso sí, ha servido para mirar con optimismo el compromiso más inminente cual es la eliminatoria en la Copa de la UEFA, que hoy habrán de disputar vascos y húngaros en el estadio Meqeyri Dosza, de Budapest, correspondiente a la jornada de ida.

La expedición bilbaína llegó el lunes a la capital húngara, por vía aérea, y se hospedó en un céntrico hotel, a orillas del Danubio. Le acompañan numerosos hinchas, que han llenado dos aviones.

Ayer, los muchachos de KoIdo Aguirre realizaron un breve entrenamiento para desentumecer los músculos y, al mismo tiempo, comprobar el estado del terreno.

La temperatura que ha acogido a los expedicionarios no la mejoran en las mismísimas islas Canarias, pues 22 grados no es algo frecuente por aquellos pagos en esta época.

Repetimos que hay esperanzas más o menos fundadas, pues en todos está la idea del buen momento atlético, pero a nadie se le escapa que el actual líder de la competición magiar no ofrecerá tantas facilidades como el Real Madrid en el Bernabéu. Pero el rostro de los aficionados menos puestos al día se ha ensombrecido al enterarse de que Churruca, por no haberse pre sentado su ficha, dada la tardanza de su incorporación al club con la antelación necesaria en el domicilio de la UEFA, y Oñaederra, por impedimentos propios de quien se encuentra cumpliendo el servicio militar, no han podido desplazarse a Hungría. Quizá la ausencia de éste no fuera tan sensible si se pudiera contar con el concurso de Goicoechea, pero el joven libero ha tenido que quedarse en Bilbao como consecuencia de un tirón muscular producido en el encuentro frente al Real Madrid.

En su lugar, KoIdo Aguirre ha solicitado los servicios de un delantero centro, Bengoechea, que el año pasado fuera el goleador del Bilbao Athletic de Tercera División; asimismo, ha convocado a Sarabia, procedente del mismo equipo, de quien cuentan y no acaban, aunque en Primera División está por demostrarlo, y que desempeña funciones de centrocampista. El tercer hombre incorporado a la expedición en Biarritz fue Madariaga.

De todas formas, el once inicial previsto por el entrenador rojiblanco será el siguiente: Iríbar; Lasa, Astrain, Madariaga o Guisasola, Escalza; Garay, Villar, Irureta; Dani Amorrortu y Rojo I.

Como se ve, la duda de KoIdo Aguirre reside en Madariaga o Guisasola. Es posible que se decida por este último, pues parece que no es muy partidario del rendimiento del primero.

Y a propósito de este tema, en Bilbao corren insistentes rumores no confirmados por el club, como suele ser tradicional en el Athletic, de que se trata de traspasarlo o venderlo a quien ofrezca una cantidad que la directiva estime conveniente.

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