Divergencias en el Consell sobre su vinculación a la oposición española

Ayer tuvo efecto en Barcelona una reunión del Consell de Forces Polítiques de Catalunya (CFPC). Entre los acuerdos que adoptó existe uno contra la postura del presidente de la Generalidad en el exilio, Josep Tarradellas, y los partidos de centroizquierda que le apoyan.

En efecto, una de Ias resoluciones afirma que, respecto a la reunión de instancias unitarias del Estado español, a celebrar en Madrid el 4 de septiembre, el CFPC «decidirá su participación en la próxima reunión ordinaria», es decir, el próximo martes. Con ello pierde fuerza el encuentro entre Tarradellas...

Ayer tuvo efecto en Barcelona una reunión del Consell de Forces Polítiques de Catalunya (CFPC). Entre los acuerdos que adoptó existe uno contra la postura del presidente de la Generalidad en el exilio, Josep Tarradellas, y los partidos de centroizquierda que le apoyan.

En efecto, una de Ias resoluciones afirma que, respecto a la reunión de instancias unitarias del Estado español, a celebrar en Madrid el 4 de septiembre, el CFPC «decidirá su participación en la próxima reunión ordinaria», es decir, el próximo martes. Con ello pierde fuerza el encuentro entre Tarradellas y el CFPC, convocado para el domingo en un gran hotel de París.

Los antecedentes del caso vienen dados por los acuerdos entre la reunión de Tarradellas y el CFPC, llevada a cabo también en París el pasado 11 de abril. Los partidarios de Tarradellas interpretan aquellos acuerdos en el sentido que el CFPC debe consultar previamente al presidente de la Generalidad en el exilio en todo lo referente a sus relaciones con organismos políticos de ámbito español, mientras que el Partit Socialista Unificat de Catalunya y, otros grupos políticos no admiten esta limitación.

Fuentes directas indicaron que «en algunos momentos cinco partidos estuvieron enfrentados a otros cinco» (el CFPC está integrado por un total de doce organizaciones políticas). Ello demuestra que la bipolarización es importante. Sin embargo, no hay duda que el redactado del comunicado favorece a los partidos políticos opuestos a Tarradellas, ya que no reitera en absoluto que este último deba ocupar un papel importante en las relaciones con los partidos u organismos de ámbito español.

Fuentes dignas de crédito señalan que la rotura de hecho del bloque de cinco partidos de centro-izquierda, acaecida anteayer (véase EL PAIS de 25 de agosto) puede haber influido en la pérdida de voces defensoras de Tarradellas.