Muchas sorpresas y caídas en Lasarte

, Con un tiempo desapacible y lluvioso se celebró ayer en el hipódromo de Lasarte la cuarta reunión de la temporada de verano. Al no acompañar los fenómenos atmosféricos, las carreras no fueron tan brillantes como se esperaba, y el estado de la pista hizo que las sorpresas abundaran en el resultado de las pruebas.Cuando más llovía en Lasarte, los cuatro participantes en el premio José María de Cavanillas salieron a la pista. Los relámpagos y la pesadez del terreno, además del duro recorrido, hicieron que tres de los ejemplares sufrieran aparatosas caídas. Ramira fue la única que pudo te...

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, Con un tiempo desapacible y lluvioso se celebró ayer en el hipódromo de Lasarte la cuarta reunión de la temporada de verano. Al no acompañar los fenómenos atmosféricos, las carreras no fueron tan brillantes como se esperaba, y el estado de la pista hizo que las sorpresas abundaran en el resultado de las pruebas.Cuando más llovía en Lasarte, los cuatro participantes en el premio José María de Cavanillas salieron a la pista. Los relámpagos y la pesadez del terreno, además del duro recorrido, hicieron que tres de los ejemplares sufrieran aparatosas caídas. Ramira fue la única que pudo terminar la carrera sana y salva. La yegua ganadora fue montada por el francés Adda.

Luis Urbano, haciendo uso de los diez minutos que se conceden a los caballos que sufren una caída para terminar el recorrido, montó de nuevo a Vilnous, y muy despacio consiguió cubrir los metros que le restaban del recorrido.

La otra prueba, organizada por la Fegentri, fue ganada también por el francés Adda, que en esta ocasión montó a Juncalillo, del marqués de la Florida. El caballo ganador venció por varios cuerpos de diferencia, después de realizar un espléndido recorrido. Eurocrat, con Luis Urbano, era segundo, mientras que Tilario, con Enrique Romera, era tercero.

Luis Urbano, que partía como favorito en el premio Botín, no pudo hacer mucho con su caballo, que en los primeros metros del recorrido quedó rezagado varios cuerpos del pelotón, para al final, gracias a los esfuerzos de su jinete en rematar, ocupar una de las colocaciones.

Otra de las carreras que más interés había despertado entre todos los aficionados era el premio Don Zoilo, en el que tomaron parte 13 caballos. Esta prueba estaba dotada con 300.000 pesetas y se corrió sobre la distancia de 1.850 metros.

La sorpresa mayor, para muchos, se dio en este premio, en el que se impuso La Millonera a Ormuz y a Fontán. La ganadora estaba corriendo esta temporada muy bien; en sus dos últimas salidas a la pista había logrado ser primera y segunda, pero al enfrentarse en este premio con caballos de más categoría, sus posibilidades, sobre el papel, habían disminuido notablemente. El poco peso que tuvo que soportar, sólo 46 kilos, fue uno de los factores que más influyeron en el triunfo de La Millonera.

Pamué venció en el premio Badarkablar, reservado a los potros y potrancas de dos años no ganadores. El debutante Rather, de la cuadra Rosales, fue el segundo.

Cristóbal Medina consiguió su única victoria de la tarde en el premio Trucial, que se corrió en cuarto lugar del programa, montando a Magala, de la cuadra Aragón. Nibelungo y Amontillado fueron los mayores enemigos del caballo ganador en los metros finales.

La segunda victoria de la reunión la consiguió Ransel, en el premio Lucien Lyne, donde fue el encargado de conducir a Carmona, por distanciamiento de Medina, que montaba a Olaf Bright.

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