El Getafe, brillante e incisivo

El Getafe puso ayer la guinda a ese pastel siempre dulce de las fiestas del pueblo. Su clara victoria sobre el Valladolid, en un encuentro mitad homenaje a los jugadores recién ascendidos a Segunda, mitad toma de Contacto con equipos de esta división, puede ser el primer espaldarazo serio a un cuadro que el próximo año lo tendrá que recibir domingo a domingo.El Getafe, tras los partidos del Rayo y Valladolid, parece haber tomado -siempre previendo un gran margen de error- el pulso a la Segunda División. A tenor de lo presenciado en Las Margaritas ayer, se diría que no hay ninguna diferencia en...

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El Getafe puso ayer la guinda a ese pastel siempre dulce de las fiestas del pueblo. Su clara victoria sobre el Valladolid, en un encuentro mitad homenaje a los jugadores recién ascendidos a Segunda, mitad toma de Contacto con equipos de esta división, puede ser el primer espaldarazo serio a un cuadro que el próximo año lo tendrá que recibir domingo a domingo.El Getafe, tras los partidos del Rayo y Valladolid, parece haber tomado -siempre previendo un gran margen de error- el pulso a la Segunda División. A tenor de lo presenciado en Las Margaritas ayer, se diría que no hay ninguna diferencia entre el cuadro azul y un ilustre en esa categoría como el Valladolid. Quizá porque los hombres de este último conjunto se tomaron el encuentro con una alegría que sería impropia en competición, quizá por la idea de que hoy comienzan sus vacaciones -quizá, quizá, dice la canción-, los visitantes se encontraron antes de cumplirse el primer cuarto de hora dejuego con dos goles en contra.

En cualquier caso, el Getafe se volcó en un juego continuamente ofensivo. Y el marcador se quedó corto. Chiqui, Zambrano y López Botella estrellaron tres balones en las cepas del poste vallisoletano; amén de las oportunidades que Rico -minutos cuarenta y ochenta y cuatro-, Alfonso y Javi, malograron.

El Valladolid -en ello hay que hacer hincapié- presentó un equipo de circunstancias. Fallaron a la cita algunos jugadores esenciales en el esquema de juego, léase Amarillo, pero no es menos cierto que el cuadro de Segura ofreció un fútbol brillante durante muchas fases del encuentro; el primer cuarto de hora, de manera especial. Sólo en las postrimerías del partido los jugadores de ambos equipos dejaron patente un cansancio lógico, después de noventa minutos de juego ágil y calor insoportable.

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