Blas Piñar califica de "héroe" a uno de los detenidos de Montejurra

Dos mil personas se congregaron en el cine Apolo de Sevilla en la mañana del pasado domingo, para presenciar el acto de afirmación nacional patrocinado por Fuerza Nueva, en el que pronunció un discurso el consejero nacional del Movimiento, Blas Piñar.Presidiendo el escenario había una enorme pancarta que decía: «Ahora, más que nunca: Arriba España», y las tres banderas del Movimiento; la nacional, la de Falange y la tradicionalista, sostenidas por muchachos vestidos con la camisa azul y la boina roja. Junto al conferenciante, tomó asiento en la presidencia, Gonzalo Queipo de Llan...

Dos mil personas se congregaron en el cine Apolo de Sevilla en la mañana del pasado domingo, para presenciar el acto de afirmación nacional patrocinado por Fuerza Nueva, en el que pronunció un discurso el consejero nacional del Movimiento, Blas Piñar.Presidiendo el escenario había una enorme pancarta que decía: «Ahora, más que nunca: Arriba España», y las tres banderas del Movimiento; la nacional, la de Falange y la tradicionalista, sostenidas por muchachos vestidos con la camisa azul y la boina roja. Junto al conferenciante, tomó asiento en la presidencia, Gonzalo Queipo de Llano, nieto del general Queipo de Llano e hijo del general del mismo nombre, así como varios dirigentes de Fuerza Nueva.

Durante dos horas, el líder político hizo uso de la palabra para hacer un planteamiento de la situación política actual. Afirmó el señor Piñar que el Gobierno mostraba una complacencia culpable en cuanto a tolerarlos avances de la anti-España, destacando en sus críticas a los miembros del gabinete, señores Areilza y Fraga. Imitó burlonamente a Ruiz-Giménez en la actuación de éste en el homenaje al profesor Tierno Galván, teniendo palabras muy duras para Salvador de Madariaga por sus críticas contra Franco; en el mismo sentido, condenó la negativa del Gobierno a permitir el homenaje de los excombatientes el pasado día veinte. Sobre los sucesos de Montejurra, calificó de héroes al señor Marín García-Verde, presunto autor de una de las muertes, afirmando que las fotografías publicadas eran puros trucajes. Sin embargo, sobre la actuación del tradicionalista afincado en Huelva, dijo textualmente el señor Piñar: «Después de hacer dos dispáros, Marín dejó cristianamente que evacuaran al herido. Este comportamiento nunca lo hubieran tenido los terroristas de ETA.» Hizo una defensa de los hijos de Fal Conde y afirmó que elementos marxistas se habían aliado con Carlos Hugo para sembrar la confusión en Montejurra, en un acto de ejemplar religiosidad como el viacrucis hacia la cumbre del monte.