El dinero saudí entierra las quejas de Alcaraz, Djokovic y Zverev por el “apretado” calendario del tenis
La exhibición del Six Kings Slam, con el murciano ya en la final, premia a los tenistas con un millón y medio de dólares solo por participar. Zverev, aquejado de la espalda, duró solo 59 minutos en pista
Arranca el Six Kings Slam en Riad, capital de rascacielos, tráfico y polvo en la inmensidad del desierto saudí, y Alexander Zverev, tercer mejor tenista de un ranking ATP que desde el pasado año patrocina el Fondo de Inversión Pública saudí (PIF), salta al ANB Arena, recinto esponsorizado por el principal banco del país, para medirse en cuartos de final al estadounidense Taylor Fritz, cuarta mejor raqueta del circuito masculino. Menos de una hora después —59 minutos para ser exactos—, el gigante alemán cae derrotado por la vía rápida y, eliminado de un torneo al que llegó con unos problemas de espalda que arrastra desde hace tiempo, se abrazó con su rival en la red.
Solo por participar en la exhibición enmarcada por el gobierno saudí en la Riyadh Season, y pese a la contundente derrota, Zverev se embolsa un millón y medio de dólares, misma cantidad que reciben los otros cinco participantes (Carlos Alcaraz, Jannik Sinner, Novak Djokovic, Taylor Fritz y Stefanos Tsitsipas) por acudir a un torneo que no reparte puntos para el ranking ATP, pero que se anuncia a bombo y platillo en Netflix, plataforma digital que emite todos los partidos en directo, y que brinda al campeón seis millones de dólares, el mayor premio en metálico de la historia del tenis.
Zverev no es, sin embargo, el único tenista que ha llegado esta semana con visibles problemas físicos a la cita de Riad. Alcaraz, número uno del mundo y ganador, solo este año, de los torneos de Róterdam, Montecarlo, Roma, Roland Garros, Queen’s, Cincinnati, US Open y Tokio, sufrió un esguince de tobillo el pasado 25 de septiembre en la primera ronda del ATP 500 nipón. Desde la torcedura ante el argentino Sebastián Báez, el murciano ha jugado dolorido y con un aparatoso vendaje en su tobillo izquierdo, algo que no le privó de levantar su octavo título del año en Japón y viajar poco después a Arabia Saudí, donde debutó este jueves en las semifinales del Six Kings Slam ante, precisamente, el verdugo de Zverev, Taylor Fritz.
El propio Alcaraz, que se deshizo sin complicaciones del estadounidense (6-4, 6-2) en un ANB Arena con más butacas vacías de las deseadas, reincidió a comienzos de octubre en una de sus quejas más repetidas en los últimos meses: “El calendario está demasiado apretado. Tienen que hacer algo, porque hay demasiados torneos obligatorios [para los jugadores de la ATP] y no se nos permite elegir si queremos jugar o no, nos obligan a hacerlo y punto”.
Solo unos días después, ya en Riad, y después de haber justificado su ausencia en el Masters 1000 de Shangái (celebrado entre el 1 y el 12 de octubre) con el objetivo de “descansar y recuperar” unos “problemas físicos”, el murciano alabó el respiro que supone el Six Kings Slam para los mejores tenistas del circuito masculino. “Es un formato diferente”, aseguró a Reuters. “Entiendo [las críticas], pero siento que a veces la gente no entiende nuestras decisiones. En los torneos oficiales estamos 15 o 16 días seguidos con una alta exigencia física y mental. Aquí, en cambio, nos divertimos y jugamos al tenis uno o dos días y ya está. Ese es el principal motivo por el que creo que elegimos este tipo de exhibiciones”.
Así, tras superar a Fritz, Alcaraz se verá las caras en la final de este sábado con Sinner, que ha derrotado esta misma tarde a Djokovic en la otra semifinal (6-4, 6-2). Sea cual sea el desenlace del torneo —nada importará para la endiablada carrera entre Alcaraz y Sinner por el número uno del ranking mundial—, al murciano aún le quedará temporada por delante.
Tras el millonario compromiso en Riad, el seis veces campeón de Grand Slams deberá decidir si acude al Masters 1000 de París (del 26 de octubre al 2 de noviembre), donde nunca ha superado los cuartos de final. Después, su presencia está garantizada en las ATP Finals (del 9 al 16 de noviembre) y en la fase final de la Copa Davis, donde buscará, en Bolonia (del 18 al 23 de noviembre), su ansiada primera Ensaladera con España.