La resistencia inacabable de Pedro Porro hasta asentarse en la selección
El lateral del Tottenham, que sufrió mucho en sus primeras citas con la Roja, se afianza como alternativa a Carvajal
El viaje de Pedro Porro (Don Benito, Badajoz; 26 años) hasta su extraordinario desempeño en el España-Georgia del sábado a veces ha parecido una acumulación de señales que apuntaban al descarrilamiento. El lateral derecho del Tottenham debutó con la absoluta precisamente contra Georgia el 26 de marzo de 2021. Después del encuentro, se emocionó tanto hablando de lo que significaba aquello para él y par...
El viaje de Pedro Porro (Don Benito, Badajoz; 26 años) hasta su extraordinario desempeño en el España-Georgia del sábado a veces ha parecido una acumulación de señales que apuntaban al descarrilamiento. El lateral derecho del Tottenham debutó con la absoluta precisamente contra Georgia el 26 de marzo de 2021. Después del encuentro, se emocionó tanto hablando de lo que significaba aquello para él y para su familia que necesitó interrumpir unos segundos una entrevista sobre el césped para recomponerse. Pero nunca volvió a jugar con Luis Enrique.
Pasaron dos años hasta que el 28 de marzo de 2023 Luis de la Fuente volvió a alinearle. Y no salió bien. Aquel de Glasgow contra Escocia es el último partido que ha perdido España (2-0) en esta racha en la que este martes, contra Bulgaria, podría igualar su récord histórico de 29 citas oficiales seguidas sin derrota. Porro tuvo una mala noche y el seleccionador lo sustituyó en el descanso por Dani Carvajal. Transcurrió otro año hasta que volvió a jugar con España, un amistoso contra Colombia en 2024. Y fue la única otra derrota (0-1) de este ciclo fantástico.
Unos meses más tarde se quedó fuera del grupo que ganó la Eurocopa de Alemania. Porro vio el confeti desde la distancia, como había visto otro triunfo de De la Fuente en 2019, cuando por una lesión faltó al Europeo sub-21. En aquella final marcaron Fabián y Olmo, titulares cinco años más tarde en la de Berlín de la Euro.
Sin embargo, Porro nunca ha dejado de estar en el radar del seleccionador, que lo considera parte de una familia de la Roja repleta de futbolistas que han trepado con él por la escalera de las categorías inferiores. Y el lateral extremeño es un tipo obstinado que en su pelea vital se guía con la divisa de su abuelo Antonio: “Vista larga, paso corto y mala leche”.
Se ha repuesto de golpes incluso más contundentes. En el verano de 2022 el Tottenham pagó por él 45 millones de euros al Benfica, donde brilló tres temporadas. Su estreno, en una Liga más física, de mucho ritmo, y cuyo idioma apenas manejaba, resultó doloroso. Perdieron 4-1 contra el Leicester y Tim Sherwood, exentrenador de los Spurs, destrozó a Porro: “Es tan malo… Es increíble”, dijo.
Cuando hace unos meses le pidieron en Dazn que escogiera un momento suyo en la Premier, el lateral optó por aquel partido: “Me quedo con un mal momento, mi debut aquí, porque eso me dio un plus para decir: ‘Tengo que dar un pasito más’. Me dio el plus de poder estar disfrutando de la Premier League hoy en día”.
Esas ideas no le han abandonado nunca, como recordó el sábado en Elche, donde habló de su mentalidad de “dar la vuelta, esto es fútbol, no es como empieza; es como acaba”. Acababa de terminar el mejor de sus 13 partidos con la absoluta. Contra Georgia, fue el que más ocasiones creó (6), el que más centros puso (14) y el segundo que más pases completó en el último tercio (31), solo por detrás de Pedri. “Cada vez tengo más confianza, va saliendo más ese desparpajo que tengo dentro del campo”, dijo.
Desde que Carvajal se lesionó la rodilla derecha en octubre del año pasado, ha entrado en todas las listas. Ha jugado 10 partidos en un año, mientras que en los tres anteriores solo participó en tres. Con el Mundial asomando, Porro ha dado el salto con la selección y se perfila como el gran competidor del capitán del Madrid por la banda derecha. El competidor de Porro también ha sido una de sus grandes inspiraciones: “Me ha marcado mucho sobre todo en lo mental; esas ganas de trabajar todo el día, ese hambre de ganar títulos, esas ganas de ganar siempre, me han impactado”.
Este martes tiene otra ocasión con España en el José Zorrilla, otro de los lugares donde estuvo a punto de naufragar. El City lo compró al Girona por 12 millones en 2019, cuando tenía 19 años y acababa de terminar su primer curso en Primera. Sin pasar por Mánchester, lo cedió al Real Valladolid, donde apenas jugó. “No le deseo a nadie el año que yo pasé en Valladolid”, contó en una entrevista en As; “pero ahí se demuestran las mentes fuertes y que siguen hacia delante”.