El Sevilla es una ruina y Diego Alonso es destituido tras la derrota ante el Getafe

La afición del Sevilla no puede más. El equipo andaluz cayó por 0-3 ante el Getafe y sumó su partido número 10 en la Liga sin ganar. El octavo con Diego Alonso, el peor revulsivo en el banquillo de toda la historia del conjunto andaluz. El Sevilla destituyó de manera inmediata al entrenador tras la derrota con el conjunto madrileño. Su situación era insostenible. “El Sevilla FC anuncia que ha destituido a Diego Alonso como entrenador blanquirrojo. El club agradece al técnico uruguayo sus se...

La afición del Sevilla no puede más. El equipo andaluz cayó por 0-3 ante el Getafe y sumó su partido número 10 en la Liga sin ganar. El octavo con Diego Alonso, el peor revulsivo en el banquillo de toda la historia del conjunto andaluz. El Sevilla destituyó de manera inmediata al entrenador tras la derrota con el conjunto madrileño. Su situación era insostenible. “El Sevilla FC anuncia que ha destituido a Diego Alonso como entrenador blanquirrojo. El club agradece al técnico uruguayo sus servicios y desea la mejor de las suertes en el futuro”, afirmó el club en un comunicado.

El entrenador no dio ni la rueda de prensa tras el partido. Las explicaciones las dio Víctor Orta, el director deportivo. “Comunico la destitución de Diego Alonso. Toda la calidad de su trabajo no ha sido devuelta con resultados. Esa calidad de su trabajo no le ha valido para continuar en el cargo. Tenemos que buscar una reacción y eso pasa por la llegada de un nuevo entrenador. Este cuerpo técnico ha trabajado una barbaridad, pero no le ha dado la vuelta a esto. Hoy se ha visto que no daba más de sí el equipo. Entrenamos mañana por la tarde y buscaremos un técnico lo antes posible porque el martes tenemos un partido muy importante con el Granada. Mañana o pasado esperamos anunciar el próximo entrenador”, indicó. El nombre de Quique Sánchez Flores sonó con insistencia en los pasillos del estadio sevillista.

Diego Alonso ha sumado cinco de 24 puntos, a lo que se añaden cuatro derrotas consecutivas en la Liga de Campeones y la eliminación europea como colista de grupo. Gran triunfo del Getafe, que provocó la bronca de la afición, que pidió la dimisión de la directiva y que convirtió el Sánchez Pizjuán en un auténtico escándalo. Lo peor llegó en los minutos finales del choque, cuando los pases entre los jugadores del Sevilla fueron coreados con olés irónicos de los propios aficionados locales. El Sevilla es 16º y tiene los mismos puntos que el Celta y el Cádiz (este último en puestos de descenso). La bronca en Nervión fue tremenda. El Getafe, que no había ganado fuera de casa todavía, le metió un 0-3 justísimo a este triste Sevilla, que es un equipo incapaz de detener su lastimosa caída.

“Jugadores mercenarios” se escuchaba también a la conclusión de un partido que se decantó muy pronto a favor del conjunto madrileño. Al Sevilla no le sale nada y a los tres minutos un penalti de Juanlu por mano fue transformado en gol por Borja Mayoral, que sumó su tanto número 10 de la temporada. El Sevilla lo intentó, pero su juego fue un auténtico desastre. Jamás tuvo el fútbol necesario para desarbolar a un Getafe cuyos jugadores siempre se imponían en los duelos. El Sevilla era un auténtico flan, con jugadores completamente desbordados por la situación, caso del joven Juanlu, Gudelj, Soumaré o Pedrosa. Un doble error de Rakitic y Soumaré acabó con un pase de Greenwood a la entrada en solitario de Mata, que hizo el segundo tanto ante el error de colocación de Gudelj. El Getafe penalizaba de maravillas cualquier error de los andaluces. Su presión alta mostraba la debilidad de los jugadores del Sevilla, que se encuentran completamente bloqueados por la situación que les rodea.

Diego Alonso intentó reactivar a su equipo dando entrada a Januzaj en la segunda mitad, pero el ambiente era incontrolable en Nervión. Los gritos de “directiva dimisión” arreciaban mientras los jugadores eran una muestra absoluta de impotencia. El técnico, además, quitó a Ocampos, que se marchó entre las protestas de la grada por esta sustitución e incluso se sentó fuera del banquillo tras golpear varias botellas de agua. El Getafe, fuerte y seguro, como muestra el hecho de que solo ha perdido uno de sus últimos 11 partidos de Liga, hizo el tercero después de un nuevo penalti por manos de Juanlu. El canterano tuvo una actuación muy discreta. En esta ocasión fue Greenwood el que hizo el tercer gol, engañando a Dmitrovic, otro de los jugadores con los que la grada la tomó. En medio de un ambiente insostenible, la afición del Sevilla fue vaciando el Sánchez Pizjuán con el tercer tanto de los madrileños. Una imagen absolutamente desconocida en el estadio sevillista. El Getafe se coloca en la octava posición, a un punto del Betis, séptimo. La alegría se desbordó en el vestuario del Getafe por este importante triunfo.

Protesta de la afición

Centenares de aficionados tomaron la puerta de entrada del estadio sevillista, muy cercana a la zona de entrada a los vestuarios y debajo del mural principal, pidiendo la dimisión del consejo de administración. También arremetieron contra los futbolistas en un ambiente muy caldeado y enrarecido. “No ha salido el plan. El equipo, normalmente, suele reaccionar, pero hoy no lo hemos hecho, el partido ha sido muy malo por nuestra parte. Nuestra línea es muy mala, pero no hay otra que unirse como equipo y solo juntos podemos salir de esta”, afirmó Gudelj, defensa del Sevilla. “El equipo está siempre con el míster, nos es su culpa, es culpa de, sobre todo, de los jugadores que están en el campo. Este club y esta afición no merecen la situación en la que estamos”, añadió el defensa serbio, que cuajó un partido muy flojo.

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