La caída libre del encapuchado João Félix
El portugués, que falló un penalti en la tanda que perdió su selección ante Francia en los cuartos de la Eurocopa, no remonta su situación deportiva y tiene un futuro incierto ante el final de su cesión al Barcelona
João Félix comenzó la temporada presentándose encapuchado en la concentración del Atlético de Madrid de Los Ángeles de San Rafael para evitar que los redactores gráficos pudieran captar su rostro. Había una gran expectación por ver su reencuentro con Diego Pablo Simeone tras los mensajes que se habían cruzado sobre el juego del Atlético durante su cesión al Chelsea. ...
João Félix comenzó la temporada presentándose encapuchado en la concentración del Atlético de Madrid de Los Ángeles de San Rafael para evitar que los redactores gráficos pudieran captar su rostro. Había una gran expectación por ver su reencuentro con Diego Pablo Simeone tras los mensajes que se habían cruzado sobre el juego del Atlético durante su cesión al Chelsea. La imagen se repitió a su salida del Volksparkstadion de Hamburgo, después de fallar el penalti que supuso la eliminación de Portugal de los cuartos de final de la Eurocopa. El curso del atacante portugués no ha hecho más que pronunciar una caída libre que parece no tener fondo.
La Eurocopa también ha sido su último calvario. Después de que se especulara con su titularidad tras una buena actuación ante Luxemburgo en el último amistoso previo al torneo, para Roberto Martínez no ha sido ni un primer suplente. Si extrañó que no lo utilizara en el segundo tiempo para remontar la República Checa, más sorprendió que el técnico español no le diera minutos ante Turquía cuando el partido ya estaba resuelto. Le concedió la titularidad sin éxito, con Portugal ya clasificada para octavos de final, en la dolorosa derrota ante Georgia. En el cruce ante Eslovenia, prórroga incluida, no disputó ni un minuto.
“El vestuario apoyó a todos los jugadores, especialmente a él”, aseguró Roberto Martínez en la sala de prensa del Volksparkstadion. “Tiró un penalti y quienes lo tiran pueden fallar. Entró en la prórroga para controlar el juego interior y lo hizo muy bien. El penalti es una anécdota”, prosiguió el seleccionador luso. “La calidad técnica que tiene João Félix es indudable y el vestuario sabe que hay que estar unidos para seguir hacia delante”, zanjó Roberto Martínez.
“Pasé por eso hace poco tiempo, fuimos eliminados de la Champions por el Real Madrid porque fallé mi lanzamiento. Solo falla quien lo tira. El hecho de asumir la responsabilidad claro que cuesta, todos sentimos la presión en esos momentos, pero alguien tiene que fallar para que un equipo gane y le ha tocado a João. Estamos todos con él”, dijo Bernardo Silva. Leão también defendió a un jugador que hasta ahora no ha podido competir sin sacarse de la cabeza las expectativas que generan su indiscutible calidad y los 127 millones de euros que el Atlético pagó por él en el verano de 2019. Cinco años después, con Simeone y sin Simeone, sigue sin explotar. Es un jugador diferente, que hace cosas distintas, con un talento increíble. Este episodio le ayudará a ser mejor y a dar la vuelta a su situación”, le auguró Leão.
Un año para olvidar el de João Félix. Ni siquiera con su cesión al Barcelona, donde en teoría le aguardaba el contexto futbolístico que deseaba lejos de Simeone, ha podido levantar cabeza. Ahora, su futuro es incierto. Aún pertenece al Atlético de Madrid, donde tiene muy difícil volver después de aquellas declaraciones en las que manifestó, para romper la baraja y forzar su salida, que el club azulgrana era donde siempre quiso jugar. Su futuro en el Barcelona dependerá de la negociación entre los clubes, siempre con su agente Jorge Mendes, como figura clave. Este logró vestirle de azulgrana pese a que Xavi Hernández no lo quería porque opinaba que su posición era la de Pedri. La inclusión de Cancelo en el paquete fue lo que le permitió a Mendes y a Joan Laporta, su principal valedor ante Xavi, meterle con calzador en el plantel. Está por ver si Hansi Flick le considera válido y, si no es así, si el técnico alemán acepta la imposición que Xavi aceptó.
João Félix empezó bien la temporada en el Barça, pero se fue difuminando. Cuando Pedri se recuperó, Xavi empezó a relegarle. No deja de ser curioso que sus dos mejores partidos fueran contra el Atlético de Madrid. Marcó un gol en el Camp Nou y otro en el Metropolitano. Dos tantos que alejaron a los rojiblancos de la pelea por LaLiga. Un legado muy pobre para un curso que se prometía feliz y ha terminado como lo empezó. Encapuchado.
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