1 | 2 | 3 | 4 | T | |
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RMA | 27 | 21 | 18 | 19 | 85 |
AVI | 19 | 18 | 16 | 19 | 72 |
El Real Madrid cumple el trámite ante el Asvel
Derrota del Baskonia en el último segundo frente al poderoso Panathinaikos
El Real Madrid cumplió el trámite ante el Asvel (85-72). En una actuación en la que desgastaron a los franceses hasta hacerles pedir la botella de oxígeno, los hombres de Scariolo fueron de menos a más. Mientras les aguantó el fuelle a los jugadores visitantes, las diferencias eran discretas, pero cuando el Madrid impuso su calidad individual, el marcador se disparó a las distancias que se pueden esperar con solo echar un vistazo a las plantillas de los dos equipos. Con Chuma Okeke como máximo anotador, ni el 0-11 de parcial de los minutos finales, cuando el Real se dejó llevar, pensando ya en el partido de Liga contra el Baskonia, pudo maquillar la inferioridad del Asvel.
El Madrid ganó los cuatro cuartos, sin un ápice de debilidad, aunque midiendo bien sus fuerzas. Aunque el equipo francés superó en el rebote a los locales, el tiro madridista fue un ejercicio coral. Se repartieron los lanzamientos y las anotaciones. Todos sumaron salvo Gunar Grinvalds, el jugador de la cantera a quien Scariolo hizo debitar a falta de 48 segundos, pero cuando hicieron falta los triples de Llull o Capazzo, llegaron, aparte de los de Okeke, infalible en esa faceta (4 de 4), y cuando tocaba apretar algo más en defensa, allí estaba Gabi Deck remangándose. Esta vez, la nueva estrella del Asvel, el norteamericano Seijaas, no brillo tanto como frente al Baskonia. Solo le permitieron anotar nueve puntos. Más inspirado estuvo Jackson, con 16.
Pero toda la potencia de fuego francesa no alcanzaba para plantarle cara en serio al Real Madrid de un Scariolo que empieza a darle forma a su equipo, y que se enfadaba cuando sus jugadores no cumplían del todos sus órdenes, incluso cuando el marcador superaba los 20 puntos de diferencia, que se quedaron al final en 13, y el reloj descontaba inexorable hacia el final.
Mientras, el Baskonia se enfrentaba a una de las potencias de la Euroliga y aguantó lo que pudo, consiguió no distanciarse demasiado en la primera parte, cuando el Panathinaikos aceleró para poner distancia y logró adelantar en el marcador a los griegos al comienzo de la segunda parte. Fueron segundos de felicidad en el Buesa Arena (43-42), apenas un instante, porque luego, el equipo de Ataman llevó otra vez el partido a la normalidad y el marcador les sonrió de nuevo, como se esperaba en los pronósticos. Pero sin perder la cara nunca, el Baskonia consiguió no marcharse nunca de la cancha. El equipo de Paolo Galbiati, que solo conoce derrotas desde el inicio de la Euroliga y la Liga, no se rindió. Frente a un equipo superlativo, y empujado por su afición, no le perdió la cara al partido, fue rascando la diferencia, aprovechando las desatenciones griegas en ataque. Faltaban 30 segundos, perdía el Baskonia por tres puntos, pero defendió bien, robó la pelota y en la penúltima acción, a falta de cinco segundos, Forrest recibió una falta con tiros. Anotó el primero, tiró el segundo a fallar, cogió él mismo el rebote y empató (84-84) para ahogarse en la orilla tras una canasta de Kevin Nunn sobre la bocina (84-86). Su defensor no le hizo una falta a tiempo —el Baskonia no estaba en el bonus—, le permitió lanzar y evaporó la posibilidad de una prórroga.