El Baskonia se mete en el ‘playoff’ y se enfrentará al Real Madrid
Howard, Miller-Mcintyre y Sedekerskis desequilibran el partido después de un primer tiempo muy igualado
El Real Madrid ya tiene rival para el playoff. Será el Baskonia, un duelo clásico entre los dos equipos españoles para dirimir el acceso a la final a cuatro del Mercedes Benz Arena de Berlín. Los vitorianos se desmelenaron en la segunda parte del Buesa, y el Virtus, que había plantado cara durante los veinte primeros minutos, no encontró respuestas al planteamiento de Dusko Ivanovic.
El Baskonia y el Virtus se lo jugaban todo. Los vitorianos, regr...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
El Real Madrid ya tiene rival para el playoff. Será el Baskonia, un duelo clásico entre los dos equipos españoles para dirimir el acceso a la final a cuatro del Mercedes Benz Arena de Berlín. Los vitorianos se desmelenaron en la segunda parte del Buesa, y el Virtus, que había plantado cara durante los veinte primeros minutos, no encontró respuestas al planteamiento de Dusko Ivanovic.
El Baskonia y el Virtus se lo jugaban todo. Los vitorianos, regresar a un playoff cinco años después; los boloñeses, jugar uno por primera vez, porque a pesar de sumar dos títulos europeos, nunca estuvieron en una eliminatoria a ocho, así que los dos equipos salieron enchufados. El Virtus primero con Belinelli, que anotó los diez primeros puntos de su equipo, para marcar territorio, y el Baskonia con Sedekerskis, que ejerció de capitán y lideró a los suyos en los primeros minutos.
Así que, en la primera parte, la igualdad fue máxima. Nadie dominó más allá de los cuatro puntos de diferencia. Desde el primer instante se apreció que sería cuestión de resistencia; quien antes se quebrara, perdería la partida, y nadie estaba por la labor.
Se sucedieron las alternativas. Aunque cogió más rebotes el Virtus y su porcentaje de tiro exterior fue mejor que el del Baskonia, también perdió más balones, así que las fuerzas se equilibraban. Por eso, al final del primer tiempo, el marcador señalaba empate (41-41).
Pero en la segunda parte cambió todo. De repente apareció en la cancha Cody Miller-Mcintyre para liderar al Baskonia, y a su lado Howard con la capa de superhombre para anotar triples y dar asistencias, y en un abrir y cerrar de ojos, el marcador se disparó por encima de los diez puntos de ventaja. El equipo de Ivanovic salió como un huracán para buscar por la vía rápida la canasta contraria y la clasificación para estar entre los ocho primeros. Con una actuación coral, pero también con los triples de Howard (8), Sedekerskis (3) y Costello (3), el Baskonia no permitió que los italianos les tosieran en los veinte minutos finales, pese al empeño de Shengelia, que no se resignó a caer. En su antigua cancha fue quien puso alguna traza de orgullo, pero no le dio para pasar.
Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.