Florentino Pérez, sobre Ancelotti: “No quiero oír hablar más del tema. Tiene contrato y estamos contentos”
El presidente del Real Madrid asegura la continuidad del técnico, que tiene firmado un año más. “Todos nos quedamos”, añade Benzema
“Hemos logrado algo importante”, destacó un agotado Carlo Ancelotti pasada la medianoche. La victoria frente a Osasuna en la final se presentaba obligada, y casi por descontada, debido a la diferencia de estatus entre ambos equipos, pero lo que más se empeñó en destacar el italiano es que “en solo dos temporadas” habían alzado “todos los títulos posibles”: Liga, Champions, la Supercopa de España y de Europa, el Mundial de Clubes y esta Copa que les midió también a Atlético y Barcelona. “Fue merecida por el camino, eliminando a rivales muy fuertes”, acotó.
Hace unas semanas, cuando el pl...
“Hemos logrado algo importante”, destacó un agotado Carlo Ancelotti pasada la medianoche. La victoria frente a Osasuna en la final se presentaba obligada, y casi por descontada, debido a la diferencia de estatus entre ambos equipos, pero lo que más se empeñó en destacar el italiano es que “en solo dos temporadas” habían alzado “todos los títulos posibles”: Liga, Champions, la Supercopa de España y de Europa, el Mundial de Clubes y esta Copa que les midió también a Atlético y Barcelona. “Fue merecida por el camino, eliminando a rivales muy fuertes”, acotó.
Hace unas semanas, cuando el pleno todavía era una posibilidad, esta cuestión fue exhibida por él como una reivindicación de su mandato. Eran días en que su figura aparecía discutida. Y este sábado, con el metal colgando del pecho, volvió a recordar el cierre del círculo perfecto de trofeos en dos cursos (Barcelona y Bayern lo lograron en uno). “Ahora la exigencia de este club te dice que hay que preparar el martes otro partido importante, y lo hacemos felices e ilusionados”, añadió el de Reggiolo.
La duda sobre su continuidad se fue disipando en las últimas fechas, pero, si le faltaba una confirmación, la recibió antes de marcharse al hotel de Sevilla, donde el equipo pasó la noche. “No quiero oír hablar más del tema. Tiene contrato y estamos contentos”, zanjó Florentino Pérez a tres días de la ida de las semifinales contra el City. También están por concretarse las renovaciones de las piezas más distinguidas de la vieja guardia del vestuario: Benzema, Kroos y Modric. “Claro que me quedo en el Madrid, todos nos quedamos”, se mostró tajante el delantero francés, que sacó pecho por el club. “Todos quieren matar al Madrid, pero ahí está siempre, ahora ganando la Copa”, señaló en la Cope.
Con la sonrisa del triunfo y el alivio de superar el agobio del arranque de la segunda mitad, fue una noche para coger aire con Guardiola y Haaland a la vista. Antes, el horizonte de completar los seis títulos también formó parte de las conversaciones de los jóvenes, contó Rodrygo, elegido el mejor jugador de la noche gracias a su doblete. “Hablamos Vini, Camavinga y Militão que solo nos quedaba este”, explicó el brasileño, que aseguró que se encuentra en su mejor momento y volvió a reconocer que no tiene explicación a su rendimiento tan afilado en los torneos cortos y en eliminatorias. Despachó al Cacereño, revivió al Madrid ante el Atlético y ventiló a Osasuna en el primer minuto y cuando peor lo estaba pasando su equipo. “Tenemos que seguir el ejemplo de Karim, Kroos y Modric, que han ganado muchas veces y siempre quieren más”, apuntó.
En medio de la celebración, también hubo espacio para asumir algunas fallas del curso que expira. “En Liga no dimos la talla. Tenemos que mirarnos a nosotros mismos, no siempre jugamos los mejores partidos para lucharla hasta el final”, admitió Courtois en zona mixta al final de una noche en la que, contra la norma habitual, no dejó ningún milagro del belga. Achicó ante Abde en la mejor ocasión osasunista de la primera mitad y no llegó al latigazo de Lucas Torró a la hora de juego.
Ese tanto, el empate, hizo que Jagoba Arrasate pensara que el título era una posibilidad más que real. “En el minuto 70 vi que podíamos ganar. Con el 1-1, el equipo tenía mucha energía, estaba muy entero”, explicó con la pena en la cara. La diana inicial de Rodrygo, aseguró, no les mató psicológicamente tanto como la segunda. El entrenador vasco lloró al final de la velada, aún sobre el césped, mientras miraba a su grada. Lo vio a un paso, pero los suyos no acertaron a despejar una pelota después de varios rechaces y Rodrygo los ejecutó.
Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.