Xavi Hernández: “Nunca sentí que ganáramos por los árbitros”
Sin una respuesta del Barcelona sobre el ‘Caso Negreira’, el técnico azulgrana asume el rol de portavoz en la previa del clásico
El Barcelona se refugia en el silencio. Y no lo hace porque no haya en el club quién tome la palabra, sino porque todavía no hay ninguna explicación que justifique los 7,3 millones de euros que la entidad catalana pagó al exdirigente arbitral José María Enríquez Negreira entre 2001 y 2018 y bajo el liderazgo de cuatro presidentes (Joan Gaspart, Joan Laporta, Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu). Mientras Laporta ha pasado de una actitud más defensiva ...
El Barcelona se refugia en el silencio. Y no lo hace porque no haya en el club quién tome la palabra, sino porque todavía no hay ninguna explicación que justifique los 7,3 millones de euros que la entidad catalana pagó al exdirigente arbitral José María Enríquez Negreira entre 2001 y 2018 y bajo el liderazgo de cuatro presidentes (Joan Gaspart, Joan Laporta, Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu). Mientras Laporta ha pasado de una actitud más defensiva –”Están promoviendo una campaña reputacional contra el Barça”, se quejó, de entrada– a otra más beligerante –”Tengo ganas de enfrentarme a todos los sinvergüenzas que están manchando nuestro escudo”, expuso antes del clásico–, la carga pública en el Barça siempre cae en el entrenador. Le pasó a Ronald Koeman con el escándalo del Barçagate y le pasa ahora a Xavi Hernández. “Lo que diga el presidente va a misa. No quiero hablar de ese tema. Me centro en el fútbol”, se defendió el técnico azulgrana, de entrada, en la previa del clásico. No pudo. Por mucho que lo intentara, Xavi, exjugador del Barcelona (1998-2015), terminó hablando del Caso Negreira.
“No me molesta. La gente puede opinar lo que quiera. Yo sé que ganamos de manera lícita. Nunca sentí que ganáramos por los árbitros. Si hubiera sido así, me hubiese ido para casa. No quiero que me perjudiquen, pero no quiero que me ayuden”, remarcó Xavi, que ganó 25 títulos con el Barcelona en su etapa como jugador. El problema para el Barcelona es que mientras no se realiza la rueda de prensa en la que informará sobre la auditoría externa encargada y Laporta apuesta por un modo más combativo, Xavi y los jugadores quedan en la diana.
“Con toda la hostilidad que vivimos en Bilbao… fuera de casa será algo parecido a eso en todos los partidos. Tenemos que cerrarnos en nosotros mismos. Ser herméticos. Pensar en el fútbol y en el rival que toque”, dijo Xavi. Y, cuando le cuestionaron cómo sobrelleva el vestuario, todo el ruido por el Caso Negreira, resolvió: “De manera natural. Nosotros no hemos hablado del Caso Negreira. Nos centramos en jugar. Intentamos ser naturales con ellos, abstraernos. No he tenido que hacer nada diferente desde principio de temporada”.
Laporta insistió en que el Barça es víctima de una campaña. “No es por casualidad, lo sabéis todos. Tiene como objetivo a corto plazo desestabilizar al equipo y a medio plazo controlar el Barça, quedárselo”, sostuvo el presidente. No cambia el club de estrategia. Sin embargo, la falta de respuesta no es exclusiva del departamento de comunicación. Frente a la Agencia Tributaria y a la Fiscalía, los representantes legales del Barcelona asumieron que el club no disponía de ningún contrato o documentación que avalase los servicios presuntamente prestados por Negreira. “No se puede afirmar quién, por parte del FCB, fue el responsable del encargo de los servicios”, expuso el Barça, según uno de los documentos que constan en la investigación judicial, a cuyo contenido ha tenido acceso EL PAÍS.
Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.