El Sevilla vuelve a ser el Sevilla ante el PSV

Hay todavía una importante distancia entre un buen equipo como el PSV y otro como el Sevilla. Los andaluces no pasan por su mejor momento, sin duda. Tienen, sin embargo, cualidades que le hace ser todavía competitivo ante rivales como el holandés, de aceptable juego, pero muy tierno. El Sevilla, por lo tanto, recordó al de las grandes noches europeas para jugar un gran partido y desarbolar al PSV desempolvando su viejo manual. Un libro que describe un estilo basado en la intensidad, la velocidad y l...

Hay todavía una importante distancia entre un buen equipo como el PSV y otro como el Sevilla. Los andaluces no pasan por su mejor momento, sin duda. Tienen, sin embargo, cualidades que le hace ser todavía competitivo ante rivales como el holandés, de aceptable juego, pero muy tierno. El Sevilla, por lo tanto, recordó al de las grandes noches europeas para jugar un gran partido y desarbolar al PSV desempolvando su viejo manual. Un libro que describe un estilo basado en la intensidad, la velocidad y la eficacia. Cualidades que se observaron, en especial, en un gran Ocampos, decisivo en el primer tramo de la segunda mitad con un golazo y una asistencia de tacón a Gudelj. Así fabricó el Sevilla el segundo y el tercer gol de una victoria que le acerca mucho a los octavos de final de la Liga Europa, su competición, la que ha ganado en seis ocasiones, más que nadie. El PSV, que empezó dominando, se llevó un buen repaso y lo tendrá muy complicado en la vuelta el próximo jueves.

El Sevilla conserva ramalazos de su antigua grandeza para sobrevivir al inicio de un partido completamente dominado por los holandeses. El PSV de Van Nistelrooy en el banquillo es tierno, demasiado. Por eso fue incapaz de batir a Bono en una primera media hora en la que dominó a su antojo, aunque sin pegada.

El Sevilla fue creciendo, curiosamente, después de la lesión de Badé. Fernando empezó a robar balones y en la banda derecha se activaba casi de forma continua la conexión entre Óliver Torres y Navas. Por eso, a partir de la media hora el partido fue otro, dominado por el Sevilla. Pudieron marcar los andaluces en una falta de Rakitic que salió fuera por muy poco. También en un remate de Nianzou que rozó el palo. Hasta que en pleno ataque del Sevilla, Luuk De Jong perdió un balón muy inocente en la salida desde atrás de su equipo. Óliver Torres vio a Navas, que lleva desde 2004 dando ese preciso pase al primer palo para el remate del delantero de turno. Llámese Kanouté, Luis Fabiano, Negredo, Bacca, Gameiro, Ben Yedder, el propio Luuk De Jong o ahora En-Nesyri. El delantero marroquí, en gran forma, hizo el gol en el periodo de alargue de la primera mitad. Ya lleva 10 este curso en todas las competiciones que ha disputado. El Sevilla, claramente de menos a más, dominaba a un PSV más bonito que verdaderamente bueno.

El inicio de la segunda mitad del Sevilla fue explosivo. El PSV, ingenuo, dejó sacar de forma rápida un saque de banda a Navas. Ahora fue Óliver Torres el que la puso en el área, donde Ocampos hizo un control espectacular para girarse y golpear de volea. Un golazo que dejó muy tocado al conjunto holandés, incapaz de detener el aluvión que se le vino encima. Ocampos se gustó de nuevo con un taconazo para que Gudelj hiciera el tercero con un fuerte golpeo dentro del área.

El PSV intentó recomponerse tras la tempestad. Lo cierto es que gozó de alguna ocasión clara de gol. Ramalho tiró fuera por poco y Veerman lanzó un balón al palo. Hasta en eso le ha cambiado la cara a este Sevilla. Antes, ese disparo del medio holandés hubiera acabado en gol. Ahora, el conjunto andaluz sumó su quinta victoria consecutiva en el Sánchez Pizjuán para seguir soñando en Europa. Regresará a Eindhoven, donde ganó su primera Liga Europa, con una gran ventaja.

“Necesitaba un partido así. Estaba ansioso por marcar con nuestra gente y ante mi familia. En el primer gol me quedó la pelota larga, pero le di con la de palo y entró. En la segunda escuché a Nema (Gudelj) entre tanta gente y le di de taco. Le pegó muy bien”, señaló Ocampos a la finalización del partido. “La eliminatoria no está resuelta porque en fútbol puede pasar de todo”, aclaró el argentino, incorporado al Sevilla en el pasado mercado invernal.

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