Los gráficos que explican el triunfo en la Liga del Real Madrid
Aunque no ha conseguido estar entre los más fiables en defensa, el equipo de Ancelotti ha sido el que más peligro ha generado, el que ha atacado con más puntería y el que ha desplegado ataques más elaborados
Muchos de los análisis sobre el juego del Real Madrid de Carlo Ancelotti realizados al calor de las remontadas de la Champions apuntan a factores mágicos, quizá siguiendo el señuelo de las palabras del propio técnico. Sin embargo, en esta Liga que el técnico italiano ha ganado con el Madrid, un sector tan prosaico y alejado del encantamiento como el de las empresas dedicadas al registro y tratamiento de datos ha encontrado pistas que retratan la solidez del juego —y sus correcciones— con el que los blancos han atrapado su título liguero número 35. Y nada parece casual.
Uno de los mayore...
Muchos de los análisis sobre el juego del Real Madrid de Carlo Ancelotti realizados al calor de las remontadas de la Champions apuntan a factores mágicos, quizá siguiendo el señuelo de las palabras del propio técnico. Sin embargo, en esta Liga que el técnico italiano ha ganado con el Madrid, un sector tan prosaico y alejado del encantamiento como el de las empresas dedicadas al registro y tratamiento de datos ha encontrado pistas que retratan la solidez del juego —y sus correcciones— con el que los blancos han atrapado su título liguero número 35. Y nada parece casual.
1. El peligro que generan y el que permiten
Uno de los mayores problemas del Madrid de Zinedine Zidane era la escasez goleadora, arrastrada desde la marcha de Cristiano Ronaldo en el verano de 2018, y precisamente ese fue el primer aspecto en el que se notaron cambios con Ancelotti. Su equipo generó más peligro que el anterior de manera consistente: durante semanas registraron datos de goles esperados por encima de 1,50 por partido, mientras que ese umbral no se superó con tanta frecuencia con Zidane. Además, los futbolistas mejoraron algo su puntería, en especial Vinicius y Asensio, que acompañaron la mejor campaña goleadora de Karim Benzema, de modo que el Madrid pasó de promediar 1,7 goles por partido con Zidane a 2,2 con Ancelotti.
Sin embargo, eso se solapó con una contrapartida: el peligro que le generaban se disparó. De golpe, había desaparecido la pareja clásica de centrales —Ramos y Varane—, además de que el centro del campo, que seguía siendo el mismo —Casemiro, Kroos y Modric—, había cumplido otro año, todos más allá de la treintena. Si ante la escasez goleadora, Zidane había apretado la defensa hasta mantener a raya el peligro de los rivales casi siempre con ocasiones que sumaban menos de un gol esperado por partido, a Ancelotti le costó ajustar ese apartado. Hasta diciembre, el Madrid se encontraba entre los equipos más vulnerables de la Liga. En algún tramo, incluso fue el más endeble. Entonces, empezaron a encajar las piezas: el equipo había dejado de intentar presionar arriba y había encontrado que esperar más atrás le resultaba más confortable.
2. Altura de la defensa
Desde el primer año post Cristiano hasta ahora, la distancia media de la defensa del Madrid ha retrocedido algo más de dos metros y medio. Los equipos punteros de Europa suelen defender más arriba, pero a Ancelotti le funcionó el plan refugio.
3. Un portero decisivo
Además, Ancelotti se encontró con un Thibaut Courtois que, de nuevo bajo la tutela de Luis Llopis, estaba en el momento en que era más decisivo en su carrera. Si se atiende al modelo de Statsbomb, que mide la calidad de los tiros de los atacantes y la probabilidad que tienen de terminar en gol, el belga ha evitado con sus paradas 4,8 goles en lo que va de Liga.
Es el cuarto portero que más ha salvado, por detrás de Maximiano (Granada), Dituro (Celta) y Badía (Elche). Es raro que un portero de un equipo puntero necesite salvar tanto. De los de arriba, Bono (Sevilla) y Bravo (Betis) han evitado la mitad (2,4) y Oblak (Atlético) se sitúa en el otro extremo: ha encajado 7,7 más de lo esperado.
4. Fútbol control
Para controlar la Liga, el Madrid de Ancelotti se ha apoyado en la mejora en ataque, la inspiración de Courtois y un centro del campo dominante que le ha permitido gobernar el tempo de los partidos con la pelota y proteger a un cuadro algo envejecido. Las jugadas del Real son las que más tiempo duran, una media de 13 segundos, y también son las que más número de pases incluyen, 4,9 de media. Por primera vez en mucho tiempo, el Madrid es el equipo que más pases completa por partido, 570,8, por 563,5 del Barça.
5. Edad de los jugadores
El plan del control responde, en parte, al envejecimiento del núcleo duro de la plantilla. Si se mira el reparto de minutos por edad de los jugadores, se ve que los mayores de 30 años juegan más de la mitad de los minutos. Y que los que juegan esa mayoría de los minutos son los mismos que el año pasado, aunque entonces eran los mayores de 29, y también el anterior, cuando eran los mayores de 28. Y así se puede seguir hacia atrás. Además, se ve que este curso han emergido algo más los registros de los jóvenes.
6. El ataque
Pero todo lo anterior no habría sido suficiente sin una mejora en el ataque. El Madrid es el equipo que más veces tira y el que lo hace con mayor precisión: un 36% de sus disparos va a puerta. De esto ha extraído una jugosa renta que le ha otorgado un empujón decisivo: se saltó de los 1,7 goles por partido con Zidane a los 2,2 con Ancelotti.
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