Real Madrid - Chelsea, la vuelta psicológica de Tuchel
Los blancos, sin Militão para defender el 1-3 de la ida de cuartos, rechazan el victimismo del entrenador del Chelsea. “No tenemos muchas posibilidades” insiste el alemán. Lukaku también baja
En 2022, todavía hay partidos inéditos en la élite de Europa. El Chelsea nunca en su historia ha jugado en el Bernabéu. Lo hará por primera vez este martes en la vuelta de los cuartos de Champions (21.00, Movistar Liga de Campeones) con el mensaje de un cordero que acepta resignado su viaje al matadero después del 1-3 en contra de la ida. En cuanto el árbitro pitó el final hace una semana, el técnico blue, Thomas Tuchel, inició el plan del duelo en España por el único lugar posible en ese ...
En 2022, todavía hay partidos inéditos en la élite de Europa. El Chelsea nunca en su historia ha jugado en el Bernabéu. Lo hará por primera vez este martes en la vuelta de los cuartos de Champions (21.00, Movistar Liga de Campeones) con el mensaje de un cordero que acepta resignado su viaje al matadero después del 1-3 en contra de la ida. En cuanto el árbitro pitó el final hace una semana, el técnico blue, Thomas Tuchel, inició el plan del duelo en España por el único lugar posible en ese momento: el mental. “¿Cuántos equipos en el mundo consiguen remontar esto? ¿Lograr tres goles? No es realista”, lanzó el alemán en las tripas de Stamford Bridge en un intento de abrir un juego psicológico para lo que todavía resta de eliminatoria. La estrategia continuó este lunes antes de volar a Madrid. “No tenemos muchas posibilidades después del primer partido. La competición, el rival y el estadio son lo que son. Es muy improbable [pasar de ronda], el reto es increíblemente difícil, pero tenemos derecho a soñar y merece la pena intentarlo. Hay que buscar nuestro límite”, abundó el entrenador del Chelsea.
El recurso es tan evidente y socorrido como, seguramente, inevitable en busca de una palanca que provoque un giro brusco con tan poco tiempo de margen. “No nos podemos fiar de nada, sobre todo, por las palabras de Tuchel”, respondió Casemiro, que calificó la ida como “los mejores 90 minutos de la temporada” de su equipo. Para la vuelta, en ese armazón defensivo que el brasileño vigila desde su atalaya de stopper, el Madrid no cuenta con Militão por tarjetas (su lugar lo debería ocupar Nacho), ni con Vallejo e Isco, futbolistas del furgón de cola aunque con un cuadro médico inquietante por el riesgo de propagación (el primero con covid y el segundo, con síntomas de resfriado). Mendy, duda de última hora debido a una sobrecarga, sí entró en la lista.
No obstante, que Tuchel anuncie por adelantado la muerte definitiva de los suyos no significa que su pizarra esté vacía de ideas. Para el Bernabéu quiere un choque más físico, según comentó en la previa, recuperar la versión de hace un año en las semifinales, cuando centrifugaron al Madrid en ambos duelos antes de atrapar el título contra el City. En Londres, escaldado de la experiencia de la temporada pasada, el Madrid recurrió con éxito a los pulmones de Valverde, que ejerció de defensa, medio y atacante según las necesidades.
“Feliz de depender de Benzema”
El pasado sábado, los blue se recuperaron del revolcón frente a los blancos con un apabullante 0-6 al Southampton en menos de 50 minutos. En el Bernabéu no estará por lesión Romelu Lukaku, el fichaje más caro de la historia y una de las amenazas en la segunda parte de Londres, aunque nadie lo situaba en el once después meses de suplencia y falta de encaje en la estructura de Tuchel. Las piezas del Chelsea serán las mismas con las que se alzaron campeones: Kanté, Jorginho y Kovacic para tratar de imponer ese ritmo alto que pretende su entrenador, y la movilidad arriba de Havertz, Mount, Pulisic, Werner y Ziyech.
“Tengo una plantilla que conoce bien este tipo de partidos. No saldremos relajados”, aseguró Ancelotti, que no perdió el tiempo en circunloquios ni en ataques de entrenador para admitir lo que está a la vista de todos. “Es verdad que tenemos dependencia de Benzema. No lo escondemos. Yo estoy muy feliz de tener esta dependencia, muy feliz”, zanjó el italiano. El pasado sábado, el 2-0 de Lucas Vázquez al Getafe tras asistencia de Rodrygo fue el primer gol de los blancos en 35 días sin participación directa del francés, autor de dos tripletes seguidos en Champions, el último en Stamford Bridge. Él, el Bernabéu y el 1-3 de la ida son, según Tuchel, una montaña casi imposible de escalar. El Madrid, en clara ventaja para pasar a semifinales, dice que no se lo cree. Una partida mental antes de la futbolística.
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