Xavi encuentra a De Jong
El técnico del Barcelona realiza trabajos especiales con el neerlandés para que explote su mejor versión
Frenkie de Jong estaba incómodo en el lugar en el que supuestamente más cómodo se debería haber sentido. Después del Ajax, claro. Al neerlandés, un tipo tranquilo y un profesional aplicado, le inquietaban diferentes cuestiones en el Barcelona. ¿Cómo podía hablarse de su vida privada? ¿Cómo en el Barcelona se podía aceptar la derrota? ¿Cómo podía tener el cartel de jugador en venta? Había un asunto, en cualquier caso, que le preocupaba especialmente: ¿Cómo podía hacer para explotar su fútbol en el Camp Nou? “Los que me critican no ven bien los partidos”, se defendía el holandés. Para su suerte,...
Frenkie de Jong estaba incómodo en el lugar en el que supuestamente más cómodo se debería haber sentido. Después del Ajax, claro. Al neerlandés, un tipo tranquilo y un profesional aplicado, le inquietaban diferentes cuestiones en el Barcelona. ¿Cómo podía hablarse de su vida privada? ¿Cómo en el Barcelona se podía aceptar la derrota? ¿Cómo podía tener el cartel de jugador en venta? Había un asunto, en cualquier caso, que le preocupaba especialmente: ¿Cómo podía hacer para explotar su fútbol en el Camp Nou? “Los que me critican no ven bien los partidos”, se defendía el holandés. Para su suerte, Xavi Hernández se sentó en el banquillo azulgrana: “Frenkie tiene que ser un jugador importante, y lo será”. Y De Jong, que llegó al Barça hace tres temporadas con el premio del mejor centrocampista de Europa bajo el brazo, se empieza a liberar en el Camp Nou.
Antes de firmar por el cuadro azulgrana, De Jong llamó por teléfono a Ronald Koeman, uno de los ídolos de su padre John y uno de los referentes de la historia azulgrana. “Me dijo que tuviera cuidado con la vida en Barcelona, que no sintiera como si estuviese de vacaciones todo el año. Si haces esto, todo lo demás irá bien”, le aconsejó el exentrenador de Países Bajos. El volante escuchó al héroe de Wembley. Nada más aterrizar, se refugiaba en los consejos de Sergio Busquets, tanto por cómo se tenía que mover en el campo, como también por los lugares a los que tenía que ir a comer para poder pasar desapercibido. Hoy rara vez sale de Gavà, familiarizado en el Little Beach House, sucursal del exclusivo club privado Soho House, en la bahía de Garraf. Aferrado al perfil bajo, a De Jong le sorprendió que trascendiera un falso rumor sobre un problema personal que supuestamente estaba afectando a su rendimiento, como también que durante la etapa de Koeman fuera señalado como el ojito derecho del entrenador. La experiencia de Xavi para lidiar con el entorno y el vestuario comenzó a tranquilizar al holandés.
Ocurrió, sin embargo, que de entrada la relación con el técnico catalán no era muy luminosa. De hecho, De Jong no entendía algunas decisiones del técnico, mucho menos cuando al presidente Joan Laporta no le afectó la derrota en la Supercopa de España frente al Real Madrid. “Me da pena que digamos que estamos orgullosos cuando perdemos. No debe ser así. Somos el Barça y cuando pierdes debes estar decepcionado”, expuso el volante, molesto con la falta de ambición, inquieto con la idea de uno de los máximos responsables del área deportiva de club: traspasarlo. “Tiene mercado. En su posición tenemos buenos jugadores y su venta puede favorecer que llegue un jugador que necesitamos más”, aseguraban algunos en la Ciudad Deportiva.
Pero ni Xavi Hernández, ni tampoco Jordi Cruyff (oficiosamente secretario técnico) estaban dispuestos a perder a un futbolista como De Jong. Eso sí, el holandés tenía que dar un paso adelante. Despojado de los fantasmas, Frenkie se concentró en el juego. Y como no podía ser de otra manera, siguió con sus obsesiones. “Después de cada partido siempre miro las acciones en las que participo. Quiero saber en qué me equivoqué, si estaba bien colocado en el campo, si había una mejor posición para recibir el balón…”, explica el futbolista de Países Bajos. Ahora, sin embargo, tenía a uno de los mejores maestros en su posición. “Es muy autocrítico y exigente consigo mismo, siempre que le pregunto, dice que puede jugar mejor”, corroboraba el técnico azulgrana.
Vídeos para mejorar
Xavi dedica largas horas de la tarde a preparar vídeos para sus jugadores. Uno de sus diamantes por pulir era De Jong. “Ahora entiende lo que queremos de él. Sabe cuándo hacer la superioridad en la línea de tres. Fija y divide bien. Es uno de los mejores jugadores en esto”, destacó el preparador azulgrana.
Xavi encuentra a Frenkie. Y ahora, al fin, De Jong parece cómodo en el lugar en el que siempre lo debería haber estado: “Firmaría una ampliación de contrato por seis años más”, dijo.
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