Goles que delatan los males del Atlético
Los rojiblancos han encajado ya 18 tantos y apenas reaccionaron con João Félix
Al primer balón perdido por el medio, gol del Madrid. Koke arriesgó en un pase por dentro interceptado por Modric y entre Casemiro, Benzema, Asensio y Vinicius montaron una contra letal. El tanto radiografió la debilidad defensiva que asola a un equipo que acostumbraba a ser el mejor guardián de su portería. Con seis jugadores defendiendo el pase atrás de Vinicius, Benzema pudo conectar la volea libre de marca. Con los dos de este domingo, son ya 18 goles en 16 partidos los que ha encajado Jan O...
Al primer balón perdido por el medio, gol del Madrid. Koke arriesgó en un pase por dentro interceptado por Modric y entre Casemiro, Benzema, Asensio y Vinicius montaron una contra letal. El tanto radiografió la debilidad defensiva que asola a un equipo que acostumbraba a ser el mejor guardián de su portería. Con seis jugadores defendiendo el pase atrás de Vinicius, Benzema pudo conectar la volea libre de marca. Con los dos de este domingo, son ya 18 goles en 16 partidos los que ha encajado Jan Oblak. El registro es demoledor para un equipo que pocas veces ha promediado más de un gol en contra por partido.
El segundo tanto también destapó el agujero defensivo que ha alejado al Atlético a 13 puntos del líder cuando aún no se ha llegado al ecuador del campeonato. Felipe midió mal una anticipación y el Madrid volvió a desplegarse al contragolpe con mucho campo por delante y esta vez pocos efectivos del Atlético para defender la jugada.
Los dos tantos del Madrid fueron sendos mandobles que también tiraron a la lona al Atlético cuando mejor parecía estar, al principio de cada tiempo. Una embestida de Ángel Correa a Mendy nada más arrancar el partido para saltar a la presión insinuó que el Atlético buscaría al Madrid en las inmediaciones del área de Thibaut Courtois. Esa sobreexcitación del menudo delantero argentino tornó al poco en un repliegue en campo propio que justificaba la alineación de Matheus Cunha en lugar de Luis Suárez por las mayores prestaciones del brasileño para salir al contragolpe y estirar al equipo con su velocidad.
Simeone había diseñado un partido para hacer daño con el juego por dentro con Correa y Griezmann. También renunció el Cholo a la defensa de tres centrales para ganar a Carrasco como cuarto centrocampista. Ese molde le dio el control del partido al Atlético en los primeros minutos. El Madrid no encontraba espacios y a los rojiblancos les dio para que Cunha no llegara por media bota a un centro raso de Marcos Llorente y a un disparo alto de Cunha tras controlar un pase largo de De Paul.
De Koke a Felipe
El plan de Simeone contuvo al Madrid hasta que Koke falló ese pase que engendró el gol de Benzema. El varapalo paralizó al Atlético. De repente, el equipo de Simeone se encontró jugando en campo contrario sin saber qué hacer con la pelota. Ni Correa, ni Griezmann que tenían la misión de desordenar el sistema defensivo del Madrid aparecieron. Tampoco Carrasco y no había espacios para que Cunha corriera.
La inoperancia ofensiva del Atlético obligó a Simeone a darle vuelo a Lemar y a João Félix y dejar en la caseta a los desaparecidos Carrasco y Griezmann. El francés y el luso hicieron por buscarse y asociarse en los primeros minutos del segundo acto. João Félix, con un fino pase mirando al tendido, dejó solo a Cunha con Courtois. El brasileño, con ángulo para alejar la pelota del meta belga, remató centrado. Al poco, vino el error de Felipe en su intento por anticiparse y el Madrid volvió a correr a campo libre para sentenciar el partido.
El Atlético ya no se levantó y cuando pudo hacerlo, apareció Courtois. La solidez defensiva y la eficacia al contragolpe fueron del Madrid. El equipo de Simeone volvió a ser irreconocible.
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