Goles lejanos para huir del avispero

El Madrid suma por primera vez en Champions cinco tantos seguidos fuera del área, claves para ser primeros

Marco Asensio celebra el 2-0.AFP7 vía Europa Press (Europa Press)

“No sé si es zurdo o diestro”, comentaba Zinedine Zidane sobre Toni Kroos. Al Inter se lo metió con la zurda; en principio, la menos natural. El germano no solo dirige, no solo intercambia posiciones en el medio con Modric y Casemiro para sorpresa y alegría de Ancelotti —algo que no les pide, reconoció—; también acelera en la contabilidad anotadora. ...

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“No sé si es zurdo o diestro”, comentaba Zinedine Zidane sobre Toni Kroos. Al Inter se lo metió con la zurda; en principio, la menos natural. El germano no solo dirige, no solo intercambia posiciones en el medio con Modric y Casemiro para sorpresa y alegría de Ancelotti —algo que no les pide, reconoció—; también acelera en la contabilidad anotadora. Al Sheriff, hace dos semanas, se la coló desde la frontal con un golpeo de billar y frente a los italianos se apuntó su segundo emboque europeo de la temporada. Desde la 2012-13, todavía con el Bayern, no marcaba dos tantos en Europa el mismo curso.

Antes de su aparición, había amenazado Brozovic y Carvajal tuvo que tapar desde el suelo un disparo de Perisic. No mandaba el Madrid en el arranque, pero el alemán vio por primera vez la portería de frente y castigó a Handanovic con un tiro cruzado desde fuera del área. Con la pierna izquierda. Con la misma, y en otro lanzamiento de postal, le puso el lazo al encuentro Asensio. Al balear le falta continuidad y ha perdido los mimos de Zidane, pero su tarjeta de presentación esta campaña ya suma varios fogonazos. Cinco dianas sin llegar a Navidades, solo dos menos que en toda la campaña pasada.

De golpeo lejano en golpeo lejano fue sumando el Madrid en la parte final de esta fase de grupos. Las últimas cinco dianas las consiguió desde fuera del área (las tres al equipo moldavo y las dos frente al Inter), un dato único en su trayectoria en la Champions. Con la de Kroos, que hizo la número 1.000 de los blancos en la competición en 455 partidos, los locales empezaron a amarrar el liderato y a huir del avispero de muchos primeros clasificados (Liverpool, Bayern, United, y Chelsea o Juve) en el sorteo de octavos, el principal objetivo de la noche.

La diana del alemán sirvió también para validar por la vía de los resultados un recurso que cada vez es más un método en el conjunto blanco: tratar de abrigarse atrás para buscar las praderas con Vinicius a través de la salida de balón del teutón y Modric. La estrategia aleja a los dos muñidores de la pelota y contra el Inter acabó con 13 remates italianos en la primera parte (la cifra más alta desde la 2003/04 en Europa), pero cada vez resulta más habitual en el plan de Ancelotti, y por ahí el Madrid también encuentra vías, aunque no tantas este martes con el brasileño.

“El míster nos dijo que no presionásemos adelante. No tuvimos posesión en algunos momentos, pero hicimos oportunidades. A lo mejor nos gustaría tener mas el balón, pero es el plan del entrenador y nosotros contentos”, comentó Modric. En el debate medió sin problemas Carlo Ancelotti, que nunca rehúye de las explicaciones futbolísticas. “A veces no presionamos arriba. Con el bloque bajo en defensa estamos cómodos. No tenemos centrocampistas que puedan defender a campo abierto. No es muy estético, pero lo estamos haciendo bien. No somos un equipo intenso en el aspecto defensivo. A cambio, tenemos calidad, experiencia y compromiso”, argumentó el técnico italiano.

Autocondena

Al lado del croata y Kroos orbitó el sardo Nicoló Barella, una de las grandes esperanzas del centro del campo italiano. No paraba de trotar y gesticular, hasta que en un pulso en la banda con Militão que no iba a ningún sitio acabó expulsado por soltarle un puñetazo en la pierna al central. El menudo (1,72m) medio siempre se ha reconocido emocional e impulsivo por sus orígenes; sin embargo, en el Bernabéu su sangre entró en combustión más de la cuenta. Una autocondena en tiempos de VAR. El colegiado no necesitó ni acudir al monitor para sentenciarlo. Quién sabe si andaba dándole vueltas a la oportunidad que había dispuesto a la vuelta del descanso. Su disparo ante Courtois se marchó alto.

También las tuvo Jovic. Primero, cara a cara con Handanovic después de que Carvajal apareciera como un intruso en mitad de la defensa interista. Y en la segunda parte, con un tiro potente al palo corto que no engañó al meta nerazzurro. El serbio, que hasta entonces había actuado más de espaldas a la portería descargando balones que de frente, movió su corpachón con su habitual minimalismo. Tendente a la introspección, no juega para la grada, una actitud de riesgo en un lugar como el Bernabéu. La gente, eso sí, esta vez le dio calor y le despidió con aplausos. El resultado ayudó. El Madrid rueda feliz, incluso sin necesidad de Benzema, a la espera del evite atlético del domingo. Al final, hubo espacio hasta para Hazard.

Modric: “Me siento como si tuviese menos de 30 años”

Luka Modric disputó su encuentro número 100 en la Champions y no perdió la ocasión para reivindicar la juventud de espíritu más que la fría documentación de un DNI. “Me siento muy bien, como si tuviese menos de 30 [tiene 36]”, comentó el croata sobre el césped. “Ahora tiene cinco días para descansar”, apuntó Ancelotti en referencia al derbi del próximo domingo. “Pienso que descansa bien en casa, que hace una vida tranquila. Son jugadores especiales y, además, atrás hay dos, como Valverde y Camavinga, que están empujando. Cuando estén cansados, estamos tranquilos. Meteremos a otros con alto rendimiento”, defendió el técnico blanco.

De momento, no hay quien mueva a Ancelotti de su plan A. Tres días después de Anoeta, aparecieron los mismos contra el Inter, salvo el relevo obligado de Benzema, puesto que recogió Jovic. Entre la posibilidad de acercarse en marzo a un rival de octavos menos lobo y la hipótesis de que las piernas lleguen muy cargadas a la primavera por la condensación de minutos en los mismos jugadores, Carletto primó lo primero. En su primera etapa en el Bernabéu, enganchó una racha de victorias todavía mejor que las nueve seguidas de ahora (22), también sin apenas rotar, y, según su teoría, si todo acabó muy mal para sus intereses (despedido tras no cazar ningún título gordo), no fue por la falta de descansos antes de Navidades, sino por las lesiones después de las fiestas que causaron un bache fatal de resultados. Así que, piensa el italiano, en marzo ya se verá. Contra el Atlético espera recuperar a Benzema, pero si eso no ocurre, ya anunció que ese lugar sería para Jovic.

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