“Koeman va de cara, no hay dudas con él”
Alba destaca “las ideas claras” del técnico. El Barça ha marcado 9 de sus 12 goles en el torneo a partir del minuto 88
Acabado el choque, los jugadores del Barça se abrazaron y festejaron, también hicieron una melé para disgusto del Sevilla, que días antes subió la tensión al llamar llorón a Koeman (fue el director deportivo Monchi) y a Pedri (Suso por Twitter). Lopetegui, por su parte, al acabar el duelo no le estrechó la mano a Koeman, que se cansó de esperarle en el área técnica mientras el entrenador del Sevilla protestaba a los colegiados. ...
Acabado el choque, los jugadores del Barça se abrazaron y festejaron, también hicieron una melé para disgusto del Sevilla, que días antes subió la tensión al llamar llorón a Koeman (fue el director deportivo Monchi) y a Pedri (Suso por Twitter). Lopetegui, por su parte, al acabar el duelo no le estrechó la mano a Koeman, que se cansó de esperarle en el área técnica mientras el entrenador del Sevilla protestaba a los colegiados. Pero de nada le serviría porque el Barcelona logró la remontada y estará el 17 de abril en La Cartuja (Sevilla) ante el Athletic o el Levante.
“Estoy muy orgulloso por la forma en la que hemos jugado, con la presión por todo el campo y todo el partido, con las ocasiones... Increíble. Hemos mostrado lo que se ha trabajado en las últimas semanas”, expresó Koeman con una sonrisa de oreja a oreja tras los 22 remates de su equipo (por seis el Sevilla) y más del doble de pases que su rival; “siempre hemos creído en remontar y ganar. Hemos mejorado la mentalidad y como entrenador no puedo pedir más”. O quizá sí porque se llevó un buen piropo de Jordi Alba: ”Ronald tiene ideas claras, ha ido de cara y ha hecho un trabajo magnífico. No tenemos dudas con él”.
Para Lopetegui fue lo contrario, molesto con el criterio arbitral por no mostrar la segunda cartulina a Mingueza y por no señalar un posible penalti por manos de Lenglet. “Del árbitro juzgad vosotros porque si lo hago puedo ser sancionado. Pero sí creo que hay una ocasión manifiesta de gol y requiere de una amarilla. Y la de Lenglet, pues lo he visto también, pero ellos no. Toca tragar veneno. Poco más puedo decir”. Rakitic añadió: “Ha habido pequeñas decisiones que nos han ido en contra. Esos detalles han marcado el partido. ¿Lo de Lenglet? Si es mano, es mano. Da igual la intención. El criterio no lo tenemos muy claro y es una pena que se castigue al equipo así”, resolvió el exbarcelonista.
La felicidad corría por las venas azulgranas. “Hacía tiempo que no estaba tan contento. Ha sido una noche mágica y es una pena que no pueda estar la afición con nosotros”, señaló Alba, uno de los que animó la fiesta improvisada del vestuario, donde se dieron abrazos tan sentidos como el que le dio Koeman a Messi tras el encuentro y después a Piqué, héroe de la noche al lograr la prórroga sobre la bocina. Nada raro, en cualquier caso, para este Barcelona, que en esta Copa ha firmado 9 de los 12 goles a partir del minuto 88, pues ante el Cornellà, el Granada y el Sevilla llegó a la prórroga. “Gerard ha demostrado que es uno de los líderes”, señaló Koeman. “El otro día lo marqué yo al Granada y esta vez ha sido Geri. Esos goles te dan una inyección de moral muy alta. Hemos demostrado ser una piña”, convino Alba. “El gol de Piqué es una locura, se desató la euforia”, añadió Pedri.
El otro héroe fue Ter Stegen, que atajó un penalti de Ocampos con el 1-0, la primera de 11 penas máximas que el argentino falla con la camiseta del Sevilla. “Es un gran lanzador”, le definió Ter Stegen; “pero salió bien esta vez”. Así lo vio Koeman: “Era un momento muy importante y Marc es bueno en parar penaltis. Si nos hubiesen empatado, hubiera sido casi imposible remontar”. Pero el alemán se centró en lo que está por llegar al igual que hace cuando comete un error bajo los palos: “Vivamos el momento porque nos metemos en una final superimportante. Ahora, que baje esto un poco... Y a trasladarlo a la Liga”.
El Barcelona jugará la novena final de las últimas 11 disputadas. “Esto es un sueño”, expuso Pedri. Y Alba remató: “Hemos demostrado que si competimos así, será difícil ganarnos”.