El Elche mete en un apuro al Levante
El conjunto de Jorge Almirón empata a uno en el Ciutat de València y bloquea a los granotas en la zona baja de la clasificación
El Elche enciende la luz roja en Orriols. El once de la franja verde iguala a un gol en el Ciutat de València y bloquea al Levante en la zona baja de la clasificación. Cuarto empate a uno consecutivo de los granota, que sólo suman una victoria en nueve jornadas. El sorprendente y meritorio equipo novato de Jorge Almirón, que llegaba con bajas, se sacude el dominio del Levante en la segunda parte, y se consolida en LaLiga como uno de los mejores visitantes.
Con Roger recién llegado después de estar cerca de dos semanas confinado tras un positivo por la covid-19 , Vukcevic recuperado tras...
El Elche enciende la luz roja en Orriols. El once de la franja verde iguala a un gol en el Ciutat de València y bloquea al Levante en la zona baja de la clasificación. Cuarto empate a uno consecutivo de los granota, que sólo suman una victoria en nueve jornadas. El sorprendente y meritorio equipo novato de Jorge Almirón, que llegaba con bajas, se sacude el dominio del Levante en la segunda parte, y se consolida en LaLiga como uno de los mejores visitantes.
Con Roger recién llegado después de estar cerca de dos semanas confinado tras un positivo por la covid-19 , Vukcevic recuperado tras tres semanas de lesión y Bardhi fuera de combate por una hernia discal aguda, Paco López remendó el once con los jóvenes De Frutos y Dani Gómez, dándole la posición de segundo delantero o mediapunta a Gonzalo Melero. El madrileño, centrocampista mixto con bastante llegada, se divirtió en esa posición desde muy temprano. Un disparo suyo desde la frontal, que desvió el talón de Marcone, obligó al flaco Edgar Badía a confirmar que es un buen meta. El portero ilicitano se estiró y despejó a córner un balón envenenado. Badía no pudo detener segundos después un cabezazo a quemarropa del mismo Gonzalo Melero. “No nos pueden rematar en el área pequeña” se leyó por televisión en los labios del portero. Tenía razón. Campaña puso un balón en el corazón del área chica y Melero, zafándose de su marca, cabeceó agachando su 1′83 de altura para ajustar el remate y embocar después de que Vezo no llegará. Paco López saltó en el banquillo. La pizarra había funcionado. La influencia de Melero, intenso en la presión, en la ofensiva granota fue total hasta que salió del campo, fundido y con las medias bajas, en el tramo final.
En la portería granota, otro buen portero como Aitor Fernández voló a su izquierda en el minuto 36 para palmear a córner un chutazo de Pere Milla. Jorge Almirón cambió la piel del Elche y pasó a defensa de cuatro con Marcone bajando a recibir en la salida lavolpiana, pero su medular, con superioridad de efectivos, no pudo discutirle el balón a Campaña y Malsa. El Levante, desbocado en el inicio, ralentizó su frenesí habitual y esperó al Elche en tres cuartos, juntando líneas, aunque, a la mínima, sus laterales, siempre largos, salían disparados. Vezo y Postigo, los dos centrales, estuvieron más arropados.
El Elche, que echó de menos a Fidel, fue más protagonista en el arranque de la segunda mitad. Raúl Guti y Marcone empezaron a dominar el juego y el bloque ilicitano subió la línea de presión, ocupando muchos minutos campo contrario. El empate llegó a balón parado. Un centro magnífico desde la izquierda de su ataque a cargo de Josema lo remató Morente con la puntera de su bota derecha, anticipándose a la salida de Aitor, tal vez cegado por el sol. El meta vasco blocó luego un cabezazo de Gonzalo Melero.
El once de la franja verde acabó el partido metido en su área y cerrándole los espacios al Levante. Paco López sacudió su once con los cambios pero topó con Edgar Badía y con su habitual falta de acierto.