El Sevilla acaricia la Champions

La victoria ante el Mallorca (2-0) sitúa a los baleares al borde del descenso

Óliver Torres conduce el balón ante Kubo.Julio Muñoz (EFE)

Asentado sobre un gran Navas y fortalecido en torno al poderío de sus centrales y del mediocentro Fernando, el Sevilla derrotó a un desesperado Mallorca para acariciar la clasificación para la Liga de Campeones. Cuarto clasificado empatado a puntos con el Atlético en la tercera plaza, saca nueve al Villarreal. Los de Calleja deberían lograr los nueve puntos que restan y que el Sevilla no puntúe en dos partidos para arrebatarles a los andaluces la cuarta plaza. El Mallorca, por su parte, está prácticamente condenado al...

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Asentado sobre un gran Navas y fortalecido en torno al poderío de sus centrales y del mediocentro Fernando, el Sevilla derrotó a un desesperado Mallorca para acariciar la clasificación para la Liga de Campeones. Cuarto clasificado empatado a puntos con el Atlético en la tercera plaza, saca nueve al Villarreal. Los de Calleja deberían lograr los nueve puntos que restan y que el Sevilla no puntúe en dos partidos para arrebatarles a los andaluces la cuarta plaza. El Mallorca, por su parte, está prácticamente condenado al descenso con la derrota. Está a tres puntos del Alavés y el Leganés le ha pasado en la clasificación. Los vascos, además, tienen que jugar un encuentro más. La victoria sevillista salva matemáticamente a Valladolid y Eibar.

Le cuesta un mundo al Sevilla elaborar fútbol en casa. Su juego ante el necesitado Mallorca no tuvo nada que ver, por ejemplo, con el que mostró en San Mamés ante el Athletic, donde circuló el balón con más velocidad y fue mucho más profundo y rápido. La cuestión es que los de Lopetegui, como a la mayoría de los equipos de LaLiga, se atascan ante buenos planteamientos defensivos. Desmontar zagas bien montadas exige una enorme precisión y en esa tarea solo hay dos futbolistas capaces de hacerlo. Son los casos de Navas y Ocampos. El Mallorca, a tres puntos de la salvación, posición marcada por el Alavés, se defendió con mucho orden, pero casi sin llegar a la meta de Bono.

Una situación que no se esperaba viendo la cantidad de jugadores de ataque que poblaban su alineación. Jugadores como Kubo o Cucho Hernández se dedicaban más a tapar a los rivales que a generar peligro. El Sevilla, con Munir de delantero centro, apenas llegaba, circulando el balón con demasiada lentitud, sin fluidez, con Banega bien tapado por Baba y Dani Rodríguez en continuas ayudas. El peligro solo llegaba, lógicamente, por la banda derecha. Navas centró al área en el minuto 32 y Fernando, de improvisado delantero centro, remató por dos veces provocando dos buenas paradas de Reina.

Los movimientos de Fernando fueron los únicos de descolocar a la defensa del Mallorca. Los baleares solo tuvieron una opción en el primer tiempo. Banega se la jugó en el área ante Budimir y le sacó el balón en una acción que estuvo a punto de ser penalti. Y de penalti se desniveló el marcador en una acción típica del nuevo fútbol. Un centro de Ocampos fue rematado por Reguilón y el balón dio en la mano de Pozo. El VAR avisó a Cordero Vega, que decretó penalti. Marcó Ocampos para hacer su gol número 14 en LaLiga.

El Mallorca se la jugó en el segundo tiempo. Salió fuerte y luego fue acumulando delantero tras delantero en una desesperada búsqueda del empate. Le iba la vida en ello. El Sevilla, cuyos delanteros están negados, desperdició un contragolpe tras otro, mostrando sus jugadores falta de frescura en la definición. Solo Navas, incansable, se saltaba la norma una y otra vez, pero sus compañeros nunca entendieron sus centros.

El Mallorca fue acechando a un Sevilla cansado, hasta que un gran saque de puerta de Bono habilitó a En-Nesyri, que marcó con un suave toque por encima de Reina tras deshacerse de Pozo. El marroquí, hasta ese momento, había hecho un partido muy discreto. Pero remató el triunfo sevillista. El conjunto andaluz sumó su partido número 13 sin perder en LaLiga (siete victorias y seis empates) y está prácticamente clasificado para jugar la Liga de Campeones el próximo curso.

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