Nachbar: “No es factible competir antes de finales de mayo”
El representante europeo de los jugadores anuncia que se preparan para importantes conflictos contractuales tras la crisis mientras que la Euroliga mantiene la idea de completar la temporada
En tiempos de confinamiento y parón de las competiciones el teléfono del director de la Asociación de Jugadores de la Euroliga (ELPA por sus siglas en inglés) suena paradójicamente más que nunca. El esloveno Bostjan Nachbar, de 39 años, exNBA y exjugador de Barça (2013-2015) y Betis (2015-2017) entre otros equipos en 20 años de carrera, vela ahora por las condiciones laborales de los protagonistas de la mayor competición de baloncesto de Europa y marca tendencia sindical en las competiciones nacionales. En mitad de la incertidumbre mundial por la pandemia asoman las inquietudes de los jugadore...
En tiempos de confinamiento y parón de las competiciones el teléfono del director de la Asociación de Jugadores de la Euroliga (ELPA por sus siglas en inglés) suena paradójicamente más que nunca. El esloveno Bostjan Nachbar, de 39 años, exNBA y exjugador de Barça (2013-2015) y Betis (2015-2017) entre otros equipos en 20 años de carrera, vela ahora por las condiciones laborales de los protagonistas de la mayor competición de baloncesto de Europa y marca tendencia sindical en las competiciones nacionales. En mitad de la incertidumbre mundial por la pandemia asoman las inquietudes de los jugadores por el presente y futuro de esta temporada y las consecuencias contractuales derivadas de la crisis. Mientras, la Euroliga mantiene su idea de completar la presente temporada “cuando las condiciones lo permitan”. Después de la Asamblea celebrada hoy entre los clubes y la organización, reunidos de forma telemática, la máxima competición continental emitió un comunicado en el que no se no se marca fecha de reanudación, pero asume que tendrá que condensar el calendario y acabar más tarde de lo previsto para cerrar el curso cubriendo todas las etapas de fase regular, playoffs y la Final Four.
Pregunta. La Virtus de Bolonia regresó el sábado a los entrenamientos en mitad de la pandemia mientras, en España, varios equipos comienzan a aplicar expedientes de regulación temporal de empleo en sus plantillas en previsión de la cancelación definitiva de las competiciones ¿Los jugadores tienen voz en mitad de las presiones o necesidades de los equipos? ¿Hay muchos intereses cruzados?
Respuesta. No debo ni quiero comentar las acciones de los clubes que están fuera de la Euroliga. Nuestra Asociación ha dicho, claramente, que los clubes de Euroliga no deben programar entrenamientos durante todo el tiempo que dure esta crisis del Covid-19. Con estas cosas es como se expone a los jugadores y sus familias a riesgos innecesarios. En las próximas semanas se va a debatir mucho sobre si la temporada continuará o no y, por supuesto, estas decisiones van a afectar a los ingresos de los jugadores. Veremos. Estamos preparándonos para este impacto de conflictos contractuales y vamos a asesorarles sobre todas sus opciones.
P. Por la información de la que dispone, ¿estamos más cerca de la reanudación de los torneos o de la cancelación definitiva?
R. Espero equivocarme, pero cada día que pasa estamos más cerca de la cancelación definitiva de la temporada; aunque esa circunstancia no la desean ni la Euroliga, ni los clubes, ni los jugadores. Pero se está cancelando todo.
P. En caso de reanudación, ¿qué tiempo mínimo necesitarían los jugadores para activarse física y psicológicamente para la competición después de un parón así?
R. Para hacerlo con una progresividad adecuada se necesitarían al menos dos o tres semanas desde la fecha en la que tuviéramos el ok de las autoridades sanitarias para competir.
P. En la NBA hay un acuerdo de negociación colectiva que proporciona el marco legal para todos los problemas contractuales, incluida una epidemia. ¿En el baloncesto europeo hay o puede haber un acuerdo parecido o es inevitable una disputa entre jugadores y clubes en las próximas semanas?
R. De momento, no tenemos un acuerdo de negociación colectiva con la Euroliga. Ojalá lo tuviéramos ya. Espero que lo tengamos a partir de la próxima temporada. Ahora todo va a depender de las cláusulas de los contratos individuales y de las leyes laborales nacionales. Pero, en mi opinión, en caso de cancelación definitiva, la mejor solución para todos sería establecer un convenio colectivo para resolver el tema de sueldos de los jugadores hasta el final de la temporada.
P. ¿Un jugador puede desvincularse automáticamente de un equipo si este suspende su contrato temporalmente, o tiene que esperar a que se cumplan los plazos o resoluciones?
R. Vamos a tener muchos escenarios diferentes por lo que comentábamos antes. Hay diferentes normativas. De momento, todos estamos esperando a ver qué pasa con la temporada. Ese será el punto de inflexión definitivo. Cuando se aclare la situación, atenderemos los problemas contractuales, probablemente de manera individual, caso por caso.
P. ¿El plazo del 30 de junio es una frontera inamovible por contrato o, dadas las circunstancias, los jugadores se plantearían jugar más allá de esa fecha que marca el final de los contratos?
R. Pienso que sería difícil competir más allá de esa fecha, pero no imposible. Si hay reanudación, probablemente la temporada se tendría que alargar después del 30 de junio. En esa cuestión era clave la decisión del Comité Olímpico Internacional. Una vez despejado el calendario de Juegos y preolímpico veremos qué pasa. Los jugadores entenderán que, para recuperar los salarios perdidos, la temporada puede alargarse un poco más de lo previsto antes del Covis-19. En ese caso, los contratos de los jugadores también se ajustarán en consecuencia.
P. ¿Se tomaron riesgos innecesarios para los jugadores forzando partidos como el Armani Milán-Real Madrid del 3 de marzo, antes de la suspensión de la Euroliga?
R. El partido entre el Armani Milán y Real Madrid ya fue un riesgo, sí. Por eso, desde que se propagó la pandemia en Italia nuestra asociación se opuso a que se jugaran partidos en Milán. Mirando ahora hacía atrás, pienso que todas las decisiones importantes deberían haberse tomado antes. Pero entonces nadie sabía realmente cómo iba a evolucionar la situación.
P. Jordi Bertomeu, presidente de la Euroliga, habló inicialmente de “un parón mínimo hasta el 11 de abril” y desde la Euroliga se apuesta por completar la temporada. ¿Será posible cumplir los plazos?
R. Valorando la situación, a día de hoy, no veo factible que ninguna competición pudiera reanudarse antes de finales de mayo. Pero durante esta crisis hemos aprendido que estamos ante una situación cambiante. Todo cambia por horas. Solo nos queda esperar y ver cómo evoluciona todo.
P. En caso de reanudar la competición, ¿preferiría completar el calendario jugando muchos partidos en poco tiempo o buscar alternativas como ir directamente a los playoffs?
R. Esto es una decisión que tienen que tomar juntos la Euroliga y los clubes atendiendo a la situación en toda Europa. Desde la ELPA nos vamos a oponer firmemente a cualquier solución que pudiera poner en peligro la salud de los jugadores, por precipitación o acumulación de partidos.
P. ¿Qué escenario plantea en las próximas semanas? ¿Los entrenamientos como los de la Virtus son necesarios para cuidar el físico de los deportistas por si vuelve la competición o son un riesgo para su salud en este momento?
R. La evolución de la pandemia es imprevisible, pero hay una cosa clara: los jugadores no deben estar sometidos a riesgos en ninguna circunstancia. Lo primero es la salud. Sin jugadores sanos no hay competición.