La ACB alarga su suspensión hasta el 24 de abril
Los 18 clubes, reunidos por videoconferencia, extienden el parón pero no renuncian a completar el campeonato
“La voluntad de todos los clubes sigue siendo reanudar la competición y finalizar la Liga Endesa 2019-2020 en la medida y los tiempos que la situación nos permita”, expresó Antonio Martín, presidente de la ACB, al término de la reunión por videoconferencia de los 18 clubes de la asociación, que decidieron, por unanimidad, prolongar hasta el 24 de abril la suspensión decretada inicialmente para dos fines de semana.
El periodo abarca siete jornadas, de la 24 a la 30, de las 11 restantes de la fase regular y cuatro equipos tienen además otra jornada más aplazada. En la práctica, por tanto...
“La voluntad de todos los clubes sigue siendo reanudar la competición y finalizar la Liga Endesa 2019-2020 en la medida y los tiempos que la situación nos permita”, expresó Antonio Martín, presidente de la ACB, al término de la reunión por videoconferencia de los 18 clubes de la asociación, que decidieron, por unanimidad, prolongar hasta el 24 de abril la suspensión decretada inicialmente para dos fines de semana.
El periodo abarca siete jornadas, de la 24 a la 30, de las 11 restantes de la fase regular y cuatro equipos tienen además otra jornada más aplazada. En la práctica, por tanto, el encaje de partidos para ese tramo y la disputa posterior del playoff se iría inevitablemente más allá del 12 de junio, la fecha tope marcada para la conclusión del curso. La circunstancia invadiría espacios del calendario de la Euroliga e incluso del preolímpico dentro de un panorama inabarcable por impredecible. La ACB, que fue la primera competición profesional en decretar la suspensión de partidos, mide ahora su decisión para no equivocarse por exceso y se resiste a culminar la temporada pero, a la vez, se suma a la lista de incógnitas de un calendario deportivo internacional de difícil cuadratura.
Las previsiones de crecimiento de la curva de la pandemia y de extensión del estado de alarma y la circunstancia de que muchos equipos han dejado marchar a sus jugadores a sus países de origen mantienen la incertidumbre e impiden establecer cualquier agenda para la reincorporación progresiva a la actividad deportiva. Ante un perspectiva similar en el resto de Europa, las ligas de Lituania, Ucrania, Suecia, Suiza, Eslovaquia, Irlanda, Finlandia y Bélgica han anunciado sucesivamente en estos días su cancelación definitiva; en cinco de ellas proclamando campeón al primer equipo clasificado en el momento de la suspensión (el Barça en este momento en el caso de la Liga Endesa con una victoria de ventaja sobre el Madrid) y en otros tres dejando desierto el palmarés. La ACB, como la NBA y la Euroliga, aspiran a culminar su campeonato.
Las tres competiciones suspendieron la semana pasada todas sus actividades de partidos y entrenamientos ante la expansión del coronavirus. En la NBA se dieron un plazo inicial de 30 días para evaluar la situación y no prevén regresar antes de junio; en términos similares, Jordi Bertomeu, jefe de la Euroliga, estableció el parón continental provisional “como mínimo hasta el 11 de abril”; mientras que la ACB, que fue la primera, inicialmente canceló solo dos jornadas, hasta finales de este mes. Sin embargo, entendiendo que la previsión se había quedado muy corta, los 18 clubes se reunieron este lunes constituyéndose en Asamblea Extraordinaria (en lugar de la prevista para el día 23) para tratar la resolución del campeonato y las repercusiones deportivas y económicas originadas por la pandemia. No se puso finalmente sobre la mesa la posibilidad de establecer una reanudación de la competición directamente en el playoff o la de dar por concluida definitivamente la temporada. Pero algunos clubes entienden que esta sería una forma de aminorar las pérdidas puesto que estarían habilitados para extinguir los contratos que consideraran oportunos para ahorrarse dos meses de ficha acogiéndose a las “razones de fuerza mayor” que recoge el Estatuto de los Trabajadores. La indefinición sobre la reanudación o no de la temporada les impide acogerse a fórmulas de regulación temporal de empleo, a modo de ERTE deportivo.
Mientras, el Mann-Filter Casablanca de Zaragoza, de la Liga Femenina Endesa, y el Levitec Huesca, de la LEB Oro, ya han puesto en marcha expedientes temporales de regulación de empleo (ERTE) que, en ambos clubes, afectan a sus plantillas profesionales y a su personal de trabajo. “Tras la declaración del estado de alarma y el cierre de las instalaciones, el club considera que esta decisión es la única razonable. La Federación suspendió hace varios días sus Ligas por dos semanas, aunque es seguro que esa medida va a ser prorrogada. Y lo que es mucho más importante, la alerta sanitaria recomienda evitar cualquier contacto social innecesario. La plantilla estaría disponible para cuando las autoridades indiquen que es posible la reanudación de la actividad”, explica el Mann-Filter en su comunicado oficial.