El plan del Madrid es ganar tiempo

Vencer en Pilsen es vital para consolidar la nueva estrategia del club, centrada a corto plazo en fijar la energía en las eliminatorias de la Champions

Solari, en el entrenamiento.MARTIN DIVISEK (EFE)

Decía Mike Tyson que todos tenemos un plan hasta que nos golpean en la boca. Florentino Pérez y sus colaboradores concibieron en agosto un plan de ataque a la temporada que ya no tiene sentido para salir del pantano de noviembre. De forma que ahora se entregan a otro sinuoso ejercicio de cálculo, proyección y —cómo no— planificación. La nueva divisa, la consigna más repetida, es ganar tiempo, asegurar al menos el cuarto puesto de la Liga, y concentrar toda la energía en la Champions.

Según fuentes de la directiva, no hay objetivo más realista a corto y medio plazo que restar prioridad a...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Decía Mike Tyson que todos tenemos un plan hasta que nos golpean en la boca. Florentino Pérez y sus colaboradores concibieron en agosto un plan de ataque a la temporada que ya no tiene sentido para salir del pantano de noviembre. De forma que ahora se entregan a otro sinuoso ejercicio de cálculo, proyección y —cómo no— planificación. La nueva divisa, la consigna más repetida, es ganar tiempo, asegurar al menos el cuarto puesto de la Liga, y concentrar toda la energía en la Champions.

Según fuentes de la directiva, no hay objetivo más realista a corto y medio plazo que restar prioridad a la Liga y preparar el terreno para competir bien en los octavos de la Copa de Europa. Los dirigentes, inclinados a los análisis pesimistas cuando se trata de hacer balances internos, dan por hecha la clasificación entre los dos primeros del depauperado Grupo G. Por profunda que sea la actual crisis, a nadie en el entorno presidencial se le pasa por la cabeza quedar eliminado por el CSKA o el Viktoria Pilsen, el anfitrión de hoy (21.00, Movistar Liga de Campoenes) en esta pequeña localidad de Europa Central que no es el centro del mundo futbolístico sino una referencia de la industria cervecera.

Obligado a lograr tres puntos, Santiago Solari admitió que está tan presionado que su mente no le permite pensar nada más que en el partido contra el Pilsen. “Solo veo un eslabón por vez”, dijo.

El éxito de Solari, el entrenador provisional, a decir de la directiva, consiste en ir conquistando tiempo para alargar su provisionalidad y regalar a sus jefes margen para planificar con más detenimiento la salida menos improvisada que se les ocurra.

El Pilsen parece una víctima propicia a estos devaneos. Según la web Transfermarkt —los agentes FIFA no viajan sin consultarla— este equipo no se ha gastado ni un euro en fichajes esta temporada. Es decir: va con lo justo.

Si el Madrid gana, enlazará la tercera victoria consecutiva de Solari, que evitó hablar del bache de Bale invocando el carácter complejo del juego. “Las soluciones y los problemas del fútbol no son individuales, son integrales. Paso a paso”.

Sobre la firma

Archivado En