Ni Busquets ni Xabi Alonso, Marc Roca

El último referente de la cantera, comparado con los mejores medio centro, aglutina los elogios en el Espanyol

Marc Roca pelea el balón con Carvajal en el partido ante el Madrid. JUAN BARBOSA

“Hay que volver muchos años atrás. Recordar cuando uno empezaba en el fútbol. Si cuando teníamos 19 años, nos hubiesen valorado por nuestro físico o por nuestra timidez, nunca hubiésemos jugado en Primera”, explica Quique Sánchez Flores, con su voz ronca, esta vez teñida de melancolía. “Pero”, añade; “hubo un técnico que nos encontró una habilidad innata y nos abrió una puerta. A los entrenadores nos da una alegría enorme encontrar a un joven talento. Supone un aire fresco y necesario”. Y Sánchez Flores encontró al su...

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“Hay que volver muchos años atrás. Recordar cuando uno empezaba en el fútbol. Si cuando teníamos 19 años, nos hubiesen valorado por nuestro físico o por nuestra timidez, nunca hubiésemos jugado en Primera”, explica Quique Sánchez Flores, con su voz ronca, esta vez teñida de melancolía. “Pero”, añade; “hubo un técnico que nos encontró una habilidad innata y nos abrió una puerta. A los entrenadores nos da una alegría enorme encontrar a un joven talento. Supone un aire fresco y necesario”. Y Sánchez Flores encontró al suyo en el Espanyol. Se llama Marc Roca (La Granada del Penedès, 19 años) y tiene a todos embobados en Cornellà.

Me hace acordar a Busquets por la facilidad con la que se adaptó al primer equipo Víctor Sánchez,  jugador del Espanyol

La relación entre el técnico madrileño y Marc Roca parece la historia de un amor a primera vista. Todavía con ficha del filial (le quedan dos años, más uno opcional de contrato), Sánchez Flores se llevó al canterano a la pretemporada en Holanda. “Me encanta cuando un jugador joven tiene las ganas de jugar que Marc demuestra. Le abro las puertas de par en par”, aseguró. Y no engañó a nadie. Roca no volvió a pisar el Espanyol B. Debutó en Primera ante el Málaga y ya suma cuatro partidos en la máxima categoría y, en el último ante Osasuna, de su bota izquierda emergió la jugada que Gerard Moreno transformó en el primer triunfo del cuadro blanquiazul en la temporada.

Llegó al Espanyol con edad de un alevín para jugar como lateral izquierdo. Hasta que el responsable de fútbol base blanquiazul, Jordi Lardín, le encontró su sitio en el centro del campo. Entonces, Roca buscó un nuevo modelo. “Siempre me fijé en Xabi Alonso”, dice. Sin embargo, sus compañeros le encuentran otro espejo. “Me hace acordar a Sergio Busquets”, asegura Víctor Sánchez, compañero de Busi en el filial azulgrana. “Pero no por el estilo de juego, porque son diferentes, sino por la facilidad con la que se adaptaron los dos al primer equipo. Juegan igual en Tercera División que en Primera. Es muy difícil tener ese desparpajo que los hace sentir tan libres. Hay mucha gente que cuando llega al primer equipo, aun teniendo cualidades, sufre. Marc, en cambio, llega y juega como si no le importara. Eso hace que saquen todo lo que tienen dentro”, completa Víctor Sánchez.

De fútbol y economía

Hermano de futbolistas (juegan en el Atlètic Vilafranca) e hijo de padres que tienen una empresa que se dedica a la agricultura, Roca mezcla mañanas de fútbol en la Ciudad Deportiva con tardes estudiando la carrera de economía. “Es un chico estudioso, que tiene la cabeza amueblada y muchas ganas de aprender”, explica Lardín. Y se suma David López: “Más allá de la calidad que tiene como futbolista, lo que más me ha sorprendido son las ganas de mejorar que tiene en todo. Eso es algo que es muy difícil de encontrar en los jóvenes de hoy en día”. Sánchez Flores descansa en él. Y hoy, Roca estará ante el Celta (20.45). “Es inteligente, tranquilo y tiene los ojos muy abiertos… Es un futbolista que no se va aturdir”, remata Quique “encantado” con la última perla de la cantera blanquiazul.

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