Griezmann manda en Francia

El jugador del Atlético ha ganado peso en el vestuario francés hasta el punto de exigirle a Deschamps un cambio de posición en el descanso ante Irlanda

Griezmann charla con Deschamps en el entreno de este miércolesC. PLATIAU (REUTERS)

El 2016 está a punto de convertirse en el año de Antoine Griezmann. El jugador del Atlético, que se hizo padre en abril y llevó a los rojiblancos a la final de la Champions en mayo, se está convirtiendo en la gran referencia del fútbol francés, y no solo en el campo, también en el vestuario, donde se ha erigido como líder. Tanto, que según cuenta el diario Libération, el delantero obligó a Deschamps a cambiar su posición en el descanso del partido ante Irlanda.

Francia perdía entonces ...

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El 2016 está a punto de convertirse en el año de Antoine Griezmann. El jugador del Atlético, que se hizo padre en abril y llevó a los rojiblancos a la final de la Champions en mayo, se está convirtiendo en la gran referencia del fútbol francés, y no solo en el campo, también en el vestuario, donde se ha erigido como líder. Tanto, que según cuenta el diario Libération, el delantero obligó a Deschamps a cambiar su posición en el descanso del partido ante Irlanda.

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Francia perdía entonces por 0-1 y fue el jugador del Atlético uno de los encargados de arengar al equipo y reclamar soluciones al entrenador.  “Nos dijimos las cosas entre nosotros. Teníamos que espabilar, mostrar a todos que somos Francia, que si siguiésemos así íbamos a parecer unos gillipollas”, declaró el propio jugador el lunes en rueda de prensa. Griezmann eludió las preguntas sobre su repentina autoridad en el vestuario – se conformó con felicitarse de “la buena decisión táctica del míster” -, pero Libération aporta una interesante lectura sobre su cambio de actitud hasta hablar de “una toma de poder” del rojiblanco a expensas de Deschamps.

Antes del descanso, Griezmann jugaba de extremo derecho, una posición que le incomoda ya que  le obliga a dejar total libertad al lateral izquierdo contrario. “En la banda derecha, el míster me pide que ataque por el centro pero esto le deja un bulevar a mi contrario y causa desequilibrio atrás”, dice. Griezmann es un chico concienzudo. Cuenta que tuvo una charla con Deschamps antes de la Eurocopa en la que le dijo que prefería jugar en el eje del campo tal y como lo lleva haciendo en el Atlético desde hace dos años. Se lo recordó durante el descanso contra Irlanda.

Vuelta al centro

Minutos después, Deschamps retiró a Kanté y dio carrete a Coman, reconfigurando así su sistema en un 4-2-3-1 con Griezmann detrás de Giroud. “Me siento más libre en el centro”, aseguró Griezmann, que anotó los dos goles de la victoria tras la reconfiguración. El técnico francés negó después del partido haber cedido a las exigencias de su estrella. “Tampoco acabo de enterarme de que Griezmann juega así en el Atlético. A veces tenéis soluciones que funcionan un día y que no funcionan al día siguiente. Es una cuestión de encontrar el equilibrio”, aseguró Deschamps que lleva cuatro partidos cambiando de once.

Payet besa la bota de Griezmann.M. BUREAU (AFP)

Las dudas tácticas del técnico o su pragmatismo hacen dudar de su capacidad para liderar a la selección hasta el final del torneo. El diario Libération recuerda cómo el proprio Deschamps conquistó la Eurocopa del 2000 por la fuerza y liderazgo en el vestuario de jugadores como Desailly, Thuram o Zidane a expensas del entonces seleccionador, Roger Lemerre. Dieciseis años después, le toca a Deschamps asumir el pulso con sus jugadores, empezando con Griezmann, El Príncipito que aspira a ser el rey de Francia.

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