Los rebufos deciden la pole a favor de Rossi en Mugello

La última vez que Valentino Rossi logró la pole position en el gran premio de Italia fue el año 2008. Ha llovido lo suyo desde entonces; 2009 fue un año de muchas primeras filas, pero con la llegada de Bridgestone como suministrador único la cosa se le complicó. Las cosas parecen mejorar este curso con los Michelin, con los que se siente más cómodo, pues no tiene la necesidad de ser rápido desde el primer giro. Ya logró s...

La última vez que Valentino Rossi logró la pole position en el gran premio de Italia fue el año 2008. Ha llovido lo suyo desde entonces; 2009 fue un año de muchas primeras filas, pero con la llegada de Bridgestone como suministrador único la cosa se le complicó. Las cosas parecen mejorar este curso con los Michelin, con los que se siente más cómodo, pues no tiene la necesidad de ser rápido desde el primer giro. Ya logró salir desde la primera posición de la parrilla en Jerez y sumará cuatro primeras líneas de seis posibles en este inicio de curso, mucho más de lo que logró hacer en todos aquellos años con el anterior suministrador de neumáticos.

Claro que, este sábado, en Mugello, el circuito en el que es el piloto más aclamado, recibió además una ayuda extra: la de Maverick Viñales, que le sirvió de guía y le ofreció su rebufo para acercarle a la meta y a la pole. Un empujón y el veterano pasó de la séptima posición a la primera en un pispás. Antes, eso sí, había sido al revés, y la Yamaha del italiano había hecho lo mismo con el español, cuya Suzuki anda un pelín justa en cuanto a velocidad punta se refiere en este trazado tan rápido: su moto alcanza los 339 km/h (ocho km/h menos que la Ducati de Iannone, por ejemplo).

Los rebufos son vitales en Mugello, especialmente cuando lo que decide es la vuelta rápida y los tiempos, como pasó en esta sesión de clasificación, están tan apretados. Que se lo pregunten a Jorge Lorenzo, que vio cómo Andrea Iannone le birlaba una y otra vez la primera posición de la tabla. El italiano se colocó a su rueda en cuanto la luz verde indicó que el pit lane estaba abierto. Y, como acostumbra, el mallorquín salió disparado para aprovechar la pista libre. Pero Iannone le siguió. Y no perdió detalle. Tanto la primera vez como la segunda, logró rebajar los tiempos del de Yamaha en unas tres décimas. Al final, el de Ducati saldrá tercero y Lorenzo, que fue finalmente también superado por Marc Márquez (que peleó por lograr el mejor tiempo hasta el final), saldrá desde la segunda fila, con el quinto mejor tiempo. Son menos de cuatro décimas las que separan a los cinco pilotos, los favoritos a pelear por la victoria.

En sexto lugar se clasificó Aleix Espargaró, con la otra Suzuki, a casi siete décimas de Rossi. Y un poco más lento, en séptimo lugar, lo hizo Dani Pedrosa. La sorpresa del fin de semana, para mal, la ha dado, por el momento, Andrea Dovizioso, que ni siquiera pudo competir en la Q2. Tiene el cuello bloqueado, según relató el jueves, lo que le impide pilotar con naturalidad. Y saldrá desde la 13ª posición.