Inútil goleada del Madrid ante el Espanyol

Tres goles de Cristiano y uno de Marcelo deciden el partido ante un voluntarioso Espanyol (4-1)

Barcelona -
Cristiano Ronaldo reamta ante ÁlvaroAlex Caparros (Getty Images)

El Madrid se empieza de despedir de una temporada para el diván. Bipolar. De colección hasta el cambio de año y olvidable después. Llegaba el Madrid a Barcelona aferrado a una ilusión, aunque sin ilusión. Arrancó desconectado el cuadro de Ancelotti, pero rectificó para sellar el 4-1, más contundente que futbolero frente al Espanyol. El Madrid tenía las piernas en el Power8, y el...

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El Madrid se empieza de despedir de una temporada para el diván. Bipolar. De colección hasta el cambio de año y olvidable después. Llegaba el Madrid a Barcelona aferrado a una ilusión, aunque sin ilusión. Arrancó desconectado el cuadro de Ancelotti, pero rectificó para sellar el 4-1, más contundente que futbolero frente al Espanyol. El Madrid tenía las piernas en el Power8, y el pinganillo en la oreja, pendiente de lo que pasaba en el Calderón. Dependía de los favores del vecino. El Atlético no cumplió, e hiciera lo que hiciera el Madrid en Cornellà, la Liga ya no tenía remedio.

Lo peleó el conjunto blanco con lo mejor que tiene. Ese once ideal que utilizó siempre que las lesiones se lo permitieron. Una excepción Keylor Navas defendió el larguero del Madrid por sexta vez en esta Liga en lugar de Casillas, alabado en Cornellà por los hinchas madridistas, más reconocido lejos de casa que en Chamartín. En busca de la séptima plaza, que otorga el pasaporte a Europa siempre y cuando el Barça gane la Copa, el Sergio González amuralló a Kiko Casilla. Cinco defensas, por primera vez en la temporada desde el inicio de un partido, taponar las bandas para contener el vértigo de Bale y Cristiano. En el medio el duelo quedaba en un tres contra tres.

ESPANYOL, 1; REAL MADRID, 4

Espanyol: Kiko Casilla; Arbilla, Álvaro, Colotto (Montañes m. 83), Héctor Moreno, Víctor Álvarez; Víctor Sánchez, Javi López, Abraham (Mattioni, m. 83); Sergio García y Caicedo (Stuani, m. 62). No utilizados: Pau López, Mattioni, Salva Sevilla, Stuani, Cañas, Fuentes y Montañés.

Real Madrid: Keylor Navas; Carvajal (Nacho, m. 80), Varane, Pepe, Marcelo; Isco (Illarramendi, m. 71), Kroos, James; Bale, Benzema (Chicharito, m.62) y Cristiano. No utilizados: Casillas, Coentrão, Chicharito, Lucas Silva, Nacho, Illarramendi y Jesé.

Goles: 0-1. M. 58. Cristiano, 1-1. M. 73. Stuani, 1-2 . M. 78 Marcelo, 1-3 . M. 83 Cristiano, 1-4 . M. 90 Cristiano.

Árbitro: Martínez Munuera mostró cartulina amarilla a Caicedo, Pepe, Victor Sánchez, Carvajal y Marcelo.

Power8 Stadium. 30.180 espectadores.

Pero Isco, James y Kross arrancaron despistados. Imprecisos y parecían olvidados de que todavía no había sonado la campana para el recreo. Y eso que Ancelotti había pedido pelear hasta que las aritméticas dejen condenado al Madrid. Con lo que tiene, que no es mucho, el Espanyol se impuso en el medular. Voluntad y no mucho más.

Así las cosas, las pocas veces que se arrimó el Madrid a Kiko Casilla fue cuando profundizó por las bandas. Como cuando Carvajal buscó Cristiano con un centro venenoso. Sin embargo, el luso, por entonces, no había afinado la mira y su cabezazo se estrelló en la pared de la red. En cualquier caso, el Espanyol no incomodaba a Keylor Navas, sólo algunos disparos de Arbilla desde la luna y algunas asociaciones entre los dos ligeritos y habilidosos de arriba, Caicedo y Stuani, que eran más ruido que nueces.

Apretó el Madrid a la vuelta de los camerinos, se abrieron las líneas del Espanyol y conquistó el juego el cuadro blanco. Pepe mordió en la mitad del campo, soltó para Benzema, que vio aparecer a Cristiano por la banda izquierda. Esta vez, el luso no falló. El tanto de CR7 en vez de enchufar a los muchachos de Ancelotti lo volvió a desconectar. Apareció de nuevo sobre el tapete el equipo insípido que parecía no estar peleando por nada. Lo aprovechó el Espanyol, que en un lapsus de Keylor Navas, Stuani firmó el 1-1.

Tocado en el orgullo el Madrid volvió a la carga. Siempre que quiso la casa blanca marcó diferencias. Y cumplió con su deber, por más en Cornellà ya se sabía que Messi había certificado la Liga para los azulgrana. Marcelo marcó y Cristiano firmó su ‘hat-trick’. El tanto del portugués le sirvió más a él en su lucha por el Pichichi, lleva 45 y Messi 41, que al conjunto blanco que ya estaba condenado. El Madrid cumplió con su tarea y nada más. La Liga dependía de lo que pasaba en el Calderón.

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