Carla Suárez se cita con Serena

La española bate a Ivanovic (7-5, 1-6 y 6-4) y jugará en los cuartos con la número uno

Suárez celebra su victoria frente a IvanovicAlberto Martín (EFE)

Sonreía Carla Suárez durante su comparecencia ante los periodistas, después de batir a Ana Ivanovic (7-5, 1-6 y 6-4), la número siete del mundo. Sonreía porque se encuentra en un momento goloso, porque brilla en un curso en el que por fin ha encontrado la regularidad que se le resistía y le impedía dar el gran salto. Lo ha dado Carla, que ya ha saboreado las mieles del top-10 de la WTA –ahora es la 12 del ránking– y aspira a volver a filtrarse entre las mejores. ¿La pócima? No hay pócima. Simplemente, trabajo y agallas. Cuestión de cabeza.

“Lo de hoy no era una cuestión de teni...

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Sonreía Carla Suárez durante su comparecencia ante los periodistas, después de batir a Ana Ivanovic (7-5, 1-6 y 6-4), la número siete del mundo. Sonreía porque se encuentra en un momento goloso, porque brilla en un curso en el que por fin ha encontrado la regularidad que se le resistía y le impedía dar el gran salto. Lo ha dado Carla, que ya ha saboreado las mieles del top-10 de la WTA –ahora es la 12 del ránking– y aspira a volver a filtrarse entre las mejores. ¿La pócima? No hay pócima. Simplemente, trabajo y agallas. Cuestión de cabeza.

“Lo de hoy no era una cuestión de tenis, sino una cuestión mental. Y mañana [por hoy] frente a Serena también lo será”, explicaba tras doblegar a la serbia, un hueso duro de roer. Volvió a exhibir la canaria su mejor versión, ese estilo técnico y depurado que con el tiempo y unos cuantos parámetros técnicos también ha ganado en potencia. Se adjudicó el primer set y, aunque cedió el segundo con claridad (“por la intensidad del anterior”) supo contener a su rival en el definitivo.

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Tiene este jueves una cita con Serena Williams, su coco particular, una quimera que no ha podido sortear en las cinco ocasiones en las que se han visto las caras; la última en la final de Miami (6-2 y 6-0). “Es duro. Todos saben cuál es mi balance con ella. Creo que tengo que hacer algo diferente, ya sea mentalmente o de otro modo. Los precedentes no han salido bien, así que haré todo lo que esté en mi mano para intentar ganar”, señaló Carla, la única superviviente española en el cuadro femenino.

Preguntada hace unos días por quién eran las favoritas para el torneo de Madrid, la estadounidense apuntó a la rumana Simona Halep, apeada en la primera ronda del Masters, y a la tinerfeña. “Buff…”, resopló Carla, resignada ante una realidad inmensa, la que impone la número uno. “Lo habrá dicho por mi estilo de juego, que es más de tierra batida más que de pista rápida. Pero es lógico: ella no puede decir que la favorita es ella, pero está claro que sí lo es”, zanjó.

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