“Las broncas que me ha echado mi padre han sido por relajarme”

Carlos Sainz Vázquez de Castro (Madrid, 20 años) lleva varios días en Melbourne, donde el domingo se estrenará en la fórmula 1 como piloto de Toro Rosso, el equipo filial de Red Bull. Detrás queda un año de mucha presión y nervios que se le complicó todavía un poco más cuando Red Bull se decantó por Max Verstappen, un chaval de 17 años. Finalmente, el traspaso de Sebastian Vettel a Ferrari provocó un efecto en cadena que dejó un volante libre en la escudería italiana, y esta vez ya no se le escapó.

Pregunta. ¿Qué es...

Carlos Sainz Vázquez de Castro (Madrid, 20 años) lleva varios días en Melbourne, donde el domingo se estrenará en la fórmula 1 como piloto de Toro Rosso, el equipo filial de Red Bull. Detrás queda un año de mucha presión y nervios que se le complicó todavía un poco más cuando Red Bull se decantó por Max Verstappen, un chaval de 17 años. Finalmente, el traspaso de Sebastian Vettel a Ferrari provocó un efecto en cadena que dejó un volante libre en la escudería italiana, y esta vez ya no se le escapó.

Pregunta. ¿Qué es lo último que ha pagado y le ha parecido caro?

Respuesta. La cena de anoche. Aquí todo es muy caro, casi como en Mónaco.

P. ¿Se siente preparado para su primera carrera en la F-1?

R. Sí. Creo que hemos hecho los deberes , pero ahora hay que comprobarlo. No hay ninguna razón para pensar que no vayan a salir las cosas bien.

Verstappen es muy bueno, Red Bull le eligió antes que a mí”

P. ¿Qué significa que las cosas salgan bien?

R. Primero hay que terminar la cronometrada, después pasar a la Q3 e intentar puntuar en la carrera. Desde aquí parece fácil , pero tanto el equipo como yo sabemos que eso es muy complicado. Aunque se puede conseguir.

P. ¿Qué es lo que más le ha costado?

R. Hay infinidad de procedimientos que hay que hacer con el volante, cosas muy complejas cuando vas a 300 por hora. Eso es lo más complicado, encontrar el tiempo para ello. Pero para esto están los test.

P. ¿Cómo se toma este año?

R. Con mucha ilusión, con una sonrisa en la cara porque es un sueño cumplido. Estoy convencido de que si disfruto y soy positivo todo va a ir bien.

P. En su camino hasta la F-1, Red Bull siempre le ha exigido ganar para seguir apoyándole. Dado que lograrlo con un Toro Rosso se presenta complicado, ¿todo pasa por imponerse a su compañero de equipo?

R. Mi principal objetivo no es quedar por delante de Max [Verstappen] sino sacar el máximo de lo que llevo dentro. Sé perfectamente que si consigo extraer todo mi potencial estaré delante, y eso es en lo que tiene que confiar cada piloto. Tienes que centrarte en ti mismo y todo lo demás llegará.

P. Que Red Bull no haga más que promocionar a Verstappen como la reencarnación de Senna, ¿le quita presión a usted?

R. Lo que está claro es que a mí no me supone ningún problema que la gente hable de él y le ponga por las nubes porque es para hacerlo: llegar a la F-1 con 17 años no es nada fácil. Pero es importante que todo el mundo tenga claro que dentro del garaje la presión es exactamente la misma para los dos. Nos piden los mismos resultados.

P. ¿Tan bueno es?

R. Es muy bueno. Red Bull le eligió a él antes que a mí. Eso quiere decir que creen que es muy bueno y yo también lo creo. No hay más que ver sus carreras de Fórmula 3.

P. ¿Qué tipo de piloto es usted?

R. Todo el mundo lo verá a partir de este domingo. Es que no me gusta definirme, prefiero que lo hagan los demás.

De pequeño pasé mucha más presión que los demás. Me tocó sufrir mucho”

P. ¿Cuál ha sido la bronca más fuerte que le ha caído de su padre?

R. Broncas ha habido pocas, pero las que ha habido han sido por cuestiones de actitud, porque él pensaba que no estaba poniendo todo lo que podía. Ha pasado poco porque siempre he sido muy trabajador, pero si en algún momento me he relajado me lo ha dicho. De eso es de lo que más se ha preocupado.

P. ¿Los rivales tenían más ganas de adelantarle por ser hijo de Sainz?

R. Siempre te encuentras ese tipo de gente, sobre todo en karting. Te miran y saben que eres el hijo de Carlos Sainz. Entre niños es normal que te tengan un poco más de rabia y quieran ganarte porque eres el hijo de. A mí también me habría pasado.

P. ¿Su apellido le ha ayudado más que perjudicado?

R. Yo creo que la proporción está al 50%. Lo que tuve que pasar en el karting fue muy duro. Yo sufría mucha más presión que los demás, me miraban con mucho más recelo. No tenía encima únicamente los ojos de mi padre sino los de mucha otra gente. A mí me tocó sufrir mucho de pequeñito y habrá quien considere que exagero. Pero cuando tienes 10 añitos todo eso afecta. Cuando eres ya un poco más maduro, te acostumbras a esa presión y simplemente tienes la ventaja de tener a tu lado a alguien que es dos veces campeón del mundo.

Espero que Alonso haya visto en mí un piloto distinto y una buena persona”

P. ¿Cuál fue la primera vez que le ganó en una carrera?

R. Es que nunca nos hemos comparado.

P. ¿Nunca han corrido el uno contra el otro?

R. Sí, claro que sí, pero si lo hacemos en un coche de rallies él me ganará siempre, y si corremos en un kart o en un monoplaza siempre le ganaré yo. En un circuito de tierra en el que yo pudiera dar todas las vueltas que quisiera, creo que comenzaría a apretarle.

P. ¿Qué le ha dado a Fernando Alonso para que le tenga tanto cariño?

R. Sinceramente espero no haberle dado nada y que él haya visto en mí a un piloto distinto y a una buena persona.

P. ¿Se asustó en Montmeló al enterarse de lo que le había pasado?

R. No lo asimilé porque estaba centrado en lo mío y también había tenido un accidente. No me dio tiempo a preocuparme gracias a Dios porque no lo hubiera pasado nada bien.