El Bayern sigue hibernando

"Hemos luchado, hemos corrido, hemos jugado buen fútbol. El Schalke, en cambio, no ha hecho nada en absoluto. Creo que no se merecieron puntuar. Hemos jugado mucho mejor frente a un equipo ultradefensivo". Con estas palabras y con un amargo tono de voz se refirió ayer Arjen Robben al empate a uno que su equipo acababa de firmar frente al Schalke 04. Es el primer punto que el Bayern de Múnich...

"Hemos luchado, hemos corrido, hemos jugado buen fútbol. El Schalke, en cambio, no ha hecho nada en absoluto. Creo que no se merecieron puntuar. Hemos jugado mucho mejor frente a un equipo ultradefensivo". Con estas palabras y con un amargo tono de voz se refirió ayer Arjen Robben al empate a uno que su equipo acababa de firmar frente al Schalke 04. Es el primer punto que el Bayern de Múnich deja escapar del Allianz Arena desde abril de 2014. El golpe, además, llega con el escozor aún reciente de la goleada (4-1) que le había endosado el Wolfsburgo la semana pasada. Nada que ver con la primera vuelta en la Bundesliga de los bávaros, en la que cosecharon 14 victorias y solo tres empates. Parece que el invierno alemán se les ha atragantado.

Estoy muy satisfecho. Queríamos los tres puntos, pero hemos mejorado respecto a la semana pasada Pep Guardiola

Cierto es que los de Guardiola se quedaron con uno menos tras un primer cuarto de hora en que pudieron marcar en un par de ocasiones. Un fallo defensivo propició que Boateng cometiese penalti y se fuera a la ducha, al ser ocasión de gol clara. Pero Manuel Neuer paró en los 11 metros; Guardiola, conservador, decidió sacrificar a Götze para no perder consistencia defensiva, y el Bayern siguió dominando el encuentro. Ya en la segunda parte, en el minuto 67, Robben remató de cabeza un saque a balón parado de Xabi Alonso, poniendo por delante a los locales. Guardiola se puso tan contento que intentó abrazar —sin éxito, esto es Deutschland— al cuarto árbitro, con quien acababa de discutir la anulación de un gol en la jugada previa. La grada volvía a respirar tranquila.

Algo más de cinco minutos después, el capitán visitante Benedikt Höwedes igualó el encuentro, también de cabeza y también a balón parado —esta vez desde un córner—. Los cerca de 75.000 espectadores que llenaban por primera vez el Allianz Arena (el club ha ampliado en 4.000 la capacidad) se quedaron mudos. El marcador no se movería más.

Guardiola aseguró después del encuentro estar "muy satisfecho" con el resultado de los suyos. "Por supuesto que queríamos los tres puntos, pero nuestra actuación ha sido bastante mejor [que la semana pasada]", matizó el catalán.

Los de Múnich siguen liderando el campeonato alemán, con una nada desdeñable ventaja de ocho puntos sobre el Wolfsburgo. Sus verdugos de la semana pasada no supieron aprovechar el tropiezo del Bayern y empataron a su vez 1-1 contra el Eintracht. El próximo partido del Bayern será contra el Stuttgart, actualmente penúltimo de la tabla a falta de jugar un partido. Una buena ocasión para comprobar si el equipo alemán más laureado ha salido ya del estado de hibernación tras el parón navideño. En caso contrario, el Shakhtar Donetsk espera su turno para ahondar en la herida, esta vez en los octavos de Champions.