“No es hora de buscar culpables”

El Barcelona hace autocrítica aunque nadie quiere señalar a Messi, la estrella ausente

Martino grita mientras Bale supera a Bartra. Alberto Estévez (EFE)

Sergio Ramos estaba buscando un capote para lucirse en una plaza en la que ya ha celebrado algún título mientras sobre el mismo tapete las caras de tipos como Iniesta o Xavi llegaban al suelo. Dolidos, los jugadores del Barcelona parecían no entender el porqué de tantas derrotas consecutivas (tres, algo que no ocurría desde la temporada 2002-2003); contaban el balón al palo que alejó a Neymar de convertirse en el héroe de la noche, pero no los escasos disparos que el equipo hizo en to...

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Sergio Ramos estaba buscando un capote para lucirse en una plaza en la que ya ha celebrado algún título mientras sobre el mismo tapete las caras de tipos como Iniesta o Xavi llegaban al suelo. Dolidos, los jugadores del Barcelona parecían no entender el porqué de tantas derrotas consecutivas (tres, algo que no ocurría desde la temporada 2002-2003); contaban el balón al palo que alejó a Neymar de convertirse en el héroe de la noche, pero no los escasos disparos que el equipo hizo en todo el encuentro: cuatro del Barça, siete del Madrid.

¿Habrían merecido ganar? ¿Habían merecido perder? “Hablar en una final de merecimiento…”, se arrancó Gerardo Martino; “ganó el Real Madrid y punto. El golpe es muy duro porque nuestras expectativas eran muy grandes”. “Hay que hacer autocrítica y si hay que ponerse delante de la línea de disparo ahí estaré yo. Somos los primeros jodidos”, apuntó Alves, señalado por su papel en la concesión de los dos goles del Madrid.

Si hay que ponerse delante de la línea de disparo ahí estaré yo. Los jugadores somos los primeros jodidos” Dani Alves

“Hemos pagado muy caros los dos contragolpes”, explicó el técnico. “El partido se dio para que tuviéramos mucho tiempo la pelota. Cuando retrocedían hacían una línea de cuatro volantes y dejaban a Bale y Benzema arriba”. Martino, que volvió a condicionar su alineación al ubicar a Cesc por la izquierda, tuvo que trasladar de nuevo a Neymar a la derecha. Y, de nuevo, no funcionó el experimento: “Fue el mismo equipo que no tuvo un buen resultado en el Calderón, el mismo que tuvo dos grandes partidos contra el Madrid y contra el City”.

Y siguió: “El Barcelona tiene una forma de jugar única y poco modificable. No hay pelotazos, no hay jugadas largas para un nueve alto. Faltó precisión en los últimos 20 o 25 metros para encontrar el pase de gol contra un equipo que se cierra tanto”. Ahondó el director deportivo Andoni Zubizarreta en la mala fortuna: “Hemos acabado el partido en el área del Madrid. Hay momentos en los que uno trabaja mucho pero el fútbol te pone un poste de por medio”.

Hay momentos en los que uno trabaja mucho pero el fútbol te pone un poste de por medio” Andoni Zubizarreta, director deportivo del Barcelona

Nadie quiso señalar a Messi, la estrella ausente: “En una derrota como esta hacer referencias individuales es difícil. Me quedo con el partido del equipo, que tuvo mucho control aunque le faltó profundidad”, dijo Martino. “No es momento de buscar culpables individuales, los culpables somos todos. El partido se ha escapado por errores nuestros”, terció Xavi, rotundo. ¿Ha terminado una era? “Llevo escuchando lo del fin de ciclo cinco años. Se nos ha escapado la final por detalles”. Y añadió Iniesta: “Nos vamos decepcionados. Intentas llevar el peso del partido, buscar los huecos, pero el Madrid es muy determinante en sus contras. Con el 1-0 íbamos a remolque. Veníamos de una semana muy difícil en la que nos hemos caído de las competiciones”.

“No hay que buscar más excusas, ni volver atrás porque no se puede corregir nada. No nos queda otra que seguir intentar acabar lo mejor posible”, concluyó Alves.

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