Jerez 2010 y la pipa de la paz

El circuito andaluz vivió hace tres años el primer cuerpo a cuerpo entre Lorenzo y Pedrosa y sirvió también para asentar una relación turbulenta en sus inicios

Lorenzo celebra su pole ante Pedrosa. marcelo del pozo (Reuters)

En 2010 Jerez asistió a un duelo magnífico, un cara a cara entre Lorenzo y Pedrosa, que terminarían siendo los dos aspirantes al título tras la lesión de Rossi. Aquel año fue el primero que dos españoles peleaban por el título de MotoGP de manera tan evidente, y aquella carrera fue la primera en la que se batirían en duelo en la categoría reina. Además, marcó un antes y un después en su relación: “Aquello ya pasó. Ahora solo nos quedan las carreras”, diría Pedrosa cuando le preguntaron si habían enterrado el hacha de guerra. Los roces se...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

En 2010 Jerez asistió a un duelo magnífico, un cara a cara entre Lorenzo y Pedrosa, que terminarían siendo los dos aspirantes al título tras la lesión de Rossi. Aquel año fue el primero que dos españoles peleaban por el título de MotoGP de manera tan evidente, y aquella carrera fue la primera en la que se batirían en duelo en la categoría reina. Además, marcó un antes y un después en su relación: “Aquello ya pasó. Ahora solo nos quedan las carreras”, diría Pedrosa cuando le preguntaron si habían enterrado el hacha de guerra. Los roces se limitaron desde entonces a la pista y su relación empezó a ser más cordial. Aquel día sellaron oficialmente la paz. Hoy, de vuelta a Jerez, tres años después, dos títulos mundiales para Lorenzo y dos subcampeonatos para Pedrosa, son otra vez los grandes favoritos al título. Y a la victoria. Con permiso de Márquez. Y de Rossi.

Si este domingo es Lorenzo el que tiene la pole y Pedrosa el que sale segundo (Márquez saldrá tercero y Rossi, quinto), aquel 2010 fue al revés. Y la batalla se desarrolló en las últimas tres vueltas, después de la remontada del mallorquín, que adelantó a Stoner, Hayden y Rossi antes de alcanzar al catalán: “Salí muy mal, como acostumbraba entonces. Y, con el depósito lleno, me costó mucho al principio, pero poco a poco empecé a recuperar el ritmo. Vi a Vale cada vez más cerca y me dije ‘voy a ser segundo’, pero cuando le adelanté me di cuenta de que podía ganar y me fui a por Dani. A dos vueltas del final él empezó a cerrar huecos y hubo un momento en que dejó los frenos y nos tocamos; aquello me descolocó un poco”, rememora. Pero terminó haciéndose con la victoria. Eso sí, tras intentar adelantamientos imposibles y después de un choque en la curva de entrada a meta que por poco termina con los dos por los suelos.

Hoy es el mallorquín el que tiene la ‘pole’ y el catalán el que sale segundo 

“Tengo que felicitar a Dani, que ha puesto lo que tenía que poner y me lo ha dejado muy difícil. Es la carrera más valiente que le he visto hacer”, diría Lorenzo aquel domingo. Se escucharon por primera vez elogios inusuales entre ellos. Como lo fue la reacción del de Honda: “Intentaba salvar mi posición, pero no he podido. Yo estaba a la defensiva, claro. Cerré el interior y lo vi por el exterior. Nos rozamos... Fue divertido. Él ha hecho una gran carrera. Le felicito”. Aunque hoy cuenta que se lo tomó mejor de lo que una derrota así puede suponer porque no pudo luchar en igualdad de condiciones: “Aquella carrera la perdí porque tuve un problema con el sensor que controla la gasolina: la moto pensaba que no tenía suficiente combustible, se puso en modo safety y limitó el uso de gasolina para poder completar las 27 vueltas”.

“Aquel fue el primer cuerpo a cuerpo auténtico entre los dos en MotoGP. Entonces Dani actuó a la defensiva; en Brno, el año pasado, los dos fuimos al ataque”, recuerda Lorenzo. Y ganó Pedrosa. El de Honda cree que el cambio en su relación personal fue poco a poco: “Fue paulatino. Si bien, es cierto que aquel día en Jerez chocamos, pero aquello se quedó en la pista. A partir de entonces hubo respeto”, cuenta. ¿Tendrá una reválida este domingo? “¡Qué prisa por saber qué pasará en la carrera!”, remoloneaba ayer. “La moto se mueve bastante, pero creo que estamos preparados. Los tiempos están muy apretados y habrá que ver cómo está la pista después de las primeras carreras, porque el rendimiento del neumático trasero es una incógnita”, se explicó. “Los neumáticos tienen que aguantar, la pregunta es a qué ritmo”, concluía Lorenzo.

Sobre la firma

Archivado En